Como siempre, ricos y famosos dieron mucho que hablar a la prensa del corazón
este año. La boda del presidente francés, Nicolas Sarkozy, con la ex modelo y cantante Carla Bruni;
el complicado divorcio del ex Beatle Paul McCartney y Heather Mills, y el divorcio relámpago de la
diva del pop Madonna fueron algunas de las historias que ocuparon páginas y páginas.
Con decepcionante discreción, Nicolas Sarkozy, de 53 años, convirtió a Carla
Bruni en la nueva primera dama de Francia. Corría febrero. A cambio, la pareja había dado abundante
material de conversación pocas semanas antes con fotos de familia de un viaje a Jordania al que
también fue el pequeño hijo de la ex modelo. Al pueblo francés no le sentó muy bien el asunto. Por
lo tanto, Sarkozy tiró del freno de mano y ordenó mantener el mayor de los secretos con respecto al
enlace. Eso sí: se supo que el vestido blanco de Bruni fue obra de Hermès.
Bruni descolló en su rol de Primera Dama por cuestiones ajenas al Estado. Hace
pocos días un tribunal francés le concedió 57.500 dólares por los daños ocasionados por una empresa
que vendía bolsas con una imagen suya desnuda. El caso fue la última de una serie de acciones
legales emprendidas por la pareja presidencial para proteger su imagen, que han provocado críticas
que califican las iniciativas de frívolas.
La fotografía desnuda de Carla Bruni data de 1993, cuando era una modelo
profesional. La actual cantante había pedido 125.000 euros por daños a Pardon, una marca de moda en
la isla francesa de La Reunión, ubicada en el océano Indico, por haber utilizado la imagen sin su
permiso.
La ex esposa de Sarkozy, Cecilia Ciganer-Albéniz (de 50 años, con quien el
presidente francés tuvo un hijo, Louis), no lloró demasiado tiempo la decepción del divorcio. A
fines de marzo contrajo matrimonio con Richard Attias, un ejecutivo de relaciones públicas nacido
en Marruecos.
Menos discreción ofrecieron Paul McCartney y Heather Mills. Tras casi dos años
de enfrentamientos a causa del divorcio, ninguno de los dos evitó sacar a relucir los trapos
sucios.
Al final de la pelea, Mills había descripto al ex Beatle como psicótico y
maltratador. Para McCartney, el trabajo lo hizo la prensa del corazón, que publicó antiguas fotos
eróticas de Mills. El músico tuvo que entregar finalmente una parte de su patrimonio a su ex (32,2
millones de dólares).
Quizás no haya sido tanto si se tiene en cuenta que por las
mismas visicitudes el también músico inglés Phil Collins, tuvo que pagar una suma que superó en
700.000 dólares a la del pobre Paul, y además, el ex Police tuvo que hacerlo unos meses antes que
el ex Beatle.
La coctelera de la vida cotidiana no se detiene para nadie.
Y entre los dimes y diretes de la realidad, terminó el amor entre la cantante estadounidense
Madonna, de 50 años, y su ex marido, el cineasta británico Guy Ritchie, de 40.
Al parecer, Madonna acabó con los nervios de su marido con
su obsesión con la comida sana y el ejercicio físico, cuando éste sólo quería tomarse una cerveza
en el bar de la esquina. La pareja anunció oficialmente el fin de su matrimonio en octubre.
Ni Madonna (Madonna Louise Veronica Ciccone) ni Ritchie
estuvieron presentes en la audiencia del tribunal. "No hubo escenas amargas ni nadie lanzándole
agua al abogado de su pareja", dijo el periodista de la BBC Rob Broomby (quien asistió a la
audiencia) en referencia al divorcio del músico Paul McCartney y la ex modelo Heather Mills.
Ritchie, quien tiene un patrimonio personal estimado en 45
millones de dólares, renunció a aceptar una parte de la fortuna de Madonna, estimada en unos 450
millones de dólares, a pesar de que tenía derecho a ella por la ley británica.
Un mes después, de manera totalmente discreta, estaban
divorciados. En tanto, los rumores sobre la posible relación de Madonna con el beisbolista Alex
Rodríguez no se acallan.
Otra pareja que dio que hablar con sus idas y venidas
todavía fue la de la cantante británica Amy Winehouse y su marido Blake Fielder-Civil. El acaba de
salir de la cárcel y dijo que seguía amando a Amy pero debía dejarla para que ella se recuperara de
su adicción a las drogas.
También hubo encuentros. Pero el año también ofreció algunos encuentros felices,
como el de los actores españoles Penélope Cruz y Javier Bardem, pareja desde el rodaje de "Vicky
Cristina Barcelona" de Woody Allen. Lo que fue imposible de conseguir en todo 2008 fue una foto de
los dos juntos, salvo algunas robadas de unas vacaciones en la playa que publicó la revista
Hola.
Las casas reales europeas, en tanto, siguen haciéndose
rogar en lo que a bodas se refiere. Los expertos en estos asuntos consideran que ya llegó la hora
de que contraigan matrimonio el príncipe Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton, el príncipe
Alberto de Mónaco y Charlene Wittstock, y la princesa Victoria de Suecia, heredera de la corona,
con Daniel Westling. Quizá la hora llegue en 2009.
La prensa británica había especulado con que en diciembre
se anunciaría el compromiso de Guillermo y Kate, ambos de 26 años. Pero la esperanza quedó en nada
cuando se anunció que el príncipe seguiría formándose en su carrera militar.
En Mónaco, en tanto, Alberto no se decidió por el casamiento a pesar de
haber alcanzado ya los 50 años. Desde hace años que está en pareja con la nadadora sudafricana
Charlene Wittstock, pero también ese compromiso se hace esperar.