Desde sus inicios, y especialmente a partir del hermanamiento con el Estado de California en 2016, la Fundación Nueva Generación Argentina incorporó y profundizó una mirada que reconoce que los impactos de la crisis climática no son únicamente económicos, ambientales o materiales, sino que afectan de manera directa a la salud humana. Este aprendizaje, inspirado en la experiencia californiana, permitió comprender que incluso el propio sistema de salud debe repensar su rol bajo una premisa ineludible: no es posible garantizar personas sanas en un planeta enfermo.
El Estado de California, hermanado con la provincia de Santa Fe, es pionero en la investigación y el abordaje de esta problemática, tomándola como una verdadera política de Estado. En ese marco, ha creado instituciones específicas avaladas por el sector político, como la Oficina de Evaluación de Peligros para la Salud Ambiental (OEHHA), una entidad científica encargada de evaluar riesgos químicos y ambientales con el objetivo de proteger la salud pública.
Dentro de sus desarrollos, se encuentra CalEnviroScreen, una herramienta interactiva desarrollada por la Agencia de Protección Ambiental de California (CalEPA), a través de la OEHHA, que permite identificar comunidades afectadas por la contaminación al combinar datos ambientales, de salud y socioeconómicos. Integra 21 indicadores, como calidad del aire, exposición a pesticidas, sitios contaminados, etc y los traduce en puntajes y mapas que muestran dónde se concentran mayores cargas ambientales y vulnerabilidades sociales. La plataforma es de acceso público y se utiliza como una herramienta clave de justicia ambiental, ya que orienta la asignación de recursos, el diseño de políticas públicas y la priorización de acciones de saneamiento.
En Argentina, las pruebas de que las secuelas de las temperaturas extremas y la crisis climática impactan en la salud de la población son ineludibles. En 2024, un grupo de expertos que forman The Lancet Countdown, una colaboración internacional que estudia la evolución del problema, compiló y analizó las evidencias de esos efectos.
Los datos son contundentes: la exposición a las olas de calor en el país aumentó en niños menores de 1 año en un 216%. En adultos mayores de 65 años, se incrementó en un 242%. El calentamiento también repercutió con el crecimiento de las poblaciones de insectos vectores, como los que pueden transmitir el dengue y su expansión geográfica.
En noviembre de 2025, un estudio del Conicet halló que en 15 de 21 ciudades argentinas aumentaron las muertes por causas cardiovasculares, respiratorias y renales durante episodios de calor extremo entre 2005 y 2019. Y los efectos no se limitaron a zonas cálidas, ya que se observaron incrementos significativos incluso en la Patagonia. En Bariloche, las muertes por causas renales se incrementaron en un 213% respecto de los días sin ola de calor.
Desde el Hospital Universitario Austral, reconocen a la salud ambiental como un derecho inherente al ser humano que debe guiarse por el principio precautorio: aquello que se presume nocivo debe ser evitado. Pero además, teniendo en cuenta el apartado del juramento hipocrático que consiste en “no hacer daño”, entienden que sector de la salud a reducir su impacto contaminante; en tanto estas instituciones son grandes consumidoras de energía y recursos, generando cantidades significativas de residuos y emisiones de gases de efecto invernadero. Por ello este impacto debe ser minimizado, ya que de lo contrario, no solo hay una incoherencia ética, sino también una vulneración de ese principio fundamental.
Para ello, han definido un Plan de Manejo Ambiental, con el objetivo de prevenir, controlar, minimizar y mitigar los impactos adversos durante toda la operación del Hospital. En una entrevista, Verónica Torres Cerino, Gerente de Servicio de Toxicología y Gestión Ambiental del Hospital Universitario Austral, profundiza en los alcances de esta estrategia y los desafíos que implica.
¿Qué problemas has visto que sufren los pacientes que asisten al Hospital Austral en relación al cambio climático?
En el Hospital Austral contamos con un servicio de toxicología de carácter polivalente, que cobra especial relevancia durante las olas de calor, cuando se incrementan los problemas respiratorios. Las temperaturas extremas favorecen la aparición de infecciones respiratorias, que no se presentan únicamente en invierno, sino que también están asociadas a picos de contaminación del aire, tanto en ambientes internos como externos. A esto se suma la exposición a sustancias químicas, ya sea en zonas rurales o en contextos urbanos, donde las fumigaciones excesivas en distintos barrios representan un factor de riesgo adicional.
¿Qué desafíos se presentan al integrar la sostenibilidad en el sistema de salud?
Al integrar la sostenibilidad al cuidado de la salud, el principal desafío radica en cambiar un concepto profundamente arraigado: durante mucho tiempo se pensó que, en nombre del paciente, todo era válido. Bajo esa lógica, el sector salud ha recurrido de manera excesiva al uso de plásticos y materiales descartables, con un alto consumo de recursos y un impacto ambiental significativo.
Hoy el enfoque debe ser otro: pensar la salud con la menor cantidad posible de químicos y descartables, y con una integración consciente de cada material que se utiliza. Y de ninguna manera esto significa resignar calidad en la atención. Por el contrario, la calidad va de la mano de mejores decisiones: una gestión responsable de compras, una dirección de operaciones alineada con criterios de sostenibilidad, el análisis toxicológico de las sustancias empleadas y un manejo adecuado de los residuos.
En definitiva, la verdadera misión del hospital es cuidar a las personas, y las personas solo pueden estar sanas si viven en un ambiente sano, empezando por el propio hospital al que concurren.
¿Qué significa ser miembro de la Red Global de Hospitales Verdes y Saludables y la Plataforma de Acción del Laudato Sí?
Significa tener compañía en este camino, es pertenecer a una comunidad de pares de acción del sector salud (hospitales, sanatorios etc. ) que comparte el interés de generar una salud que abarque la película completa, cuidar la salud de los humanos cuidando el planeta donde habita, no podemos tener gente sana en un mundo enfermo.
¿Las políticas ambientales que implementan se están replicando en otras instituciones del sistema de salud?
Cada vez más instituciones se están sumando. Cuando se lanzó la Red Global, desde el Austral éramos miembros fundadores, junto con aproximadamente 100 hospitales. Hoy somos más de 20.000.
El futuro es promisorio, sin embargo necesitamos aún más miembros para que el sector salud mejore y sea más responsable y resiliente al clima.