Quito.- El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, aseguró que un micrófono espía hallado en junio en la embajada ecuatoriana en Londres, donde se encuentra asilado el fundador de Wikileaks, Julian Assange, podría ser parte de un plan de espionaje de Estados Unidos.
“El micrófono espía que pusieron en la oficina de nuestra embajadora en Londres (Ana Albán), yo creo que puede tener algún tipo de relación (con el espionaje estadounidense) porque esto ya es inaceptable. Todos, incluso los aliados más aliados, han sido espiados” por Washington, aseguró el ministro en una entrevista con el canal público ECTV.
Entretanto, el presidente encargado de Ecuador, el vicepresidente Jorge Glas, tildó de inaceptable y demandó correctivos a Estados Unidos por las supuestas operaciones de espionaje en varios países latinoamericanos, que fueron denunciadas el martes por el diario brasileño O Globo, basándose en documentos del informático estadounidense Edward Snowden.
“Tiene que haber transparencia, tiene que respetarse las normas internacionales que protegen el derecho a la intimidad de las telecomunicaciones que, evidentemente, han sido vulnerado”, expresó Glas en declaraciones divulgadas por el periódico electrónico del gobierno El Ciudadano.
Agregó que “es evidente que ha habido interceptaciones de correos electrónicos de autoridades en este gobierno, han sido publicadas por medios de comunicación nacionales. Esto es inaceptable y se requieren explicaciones y correctivos al más alto nivel”.
La semana pasada, Patiño reveló que organismos de inteligencia ecuatorianos descubrieron un micrófono oculto en la legación de su país de la capital británica, donde se encuentra asilado Assange desde hace un año.
El ministro aseguró entonces que el gobierno de Rafael Correa “tiene fundadas sospechas” de que las escuchas fueron realizadas por Surveillance Group Limited, una de las “mayores empresas privadas de vigilancia encubierta en Reino Unido”.
El hallazgo se produjo el 14 de junio, dos días antes de la llegada del funcionario ecuatoriano a la capital británica para reunirse con Assange y con su par británico, William Hague, para tratar la situación del australiano.
Londres ha rechazado hasta ahora conceder un salvoconducto a Assange para que pueda viajar a Ecuador.
Julian Assange buscó la protección de Quito para evitar ser extraditado a Suecia, donde es requerido por cuatro supuestas agresiones sexuales que él niega.
El australiano considera el pedido sueco como una maniobra para ser extraditado a Estados Unidos, donde teme ser condenado a cadena perpetua. (AFP)