Colombia impulsará el regreso de Venezuela a la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y al sistema interamericano de derechos humanos, y ambos países buscarán una tarea conjunta para combatir a las “mafias” que operan en la frontera para recuperar el vigor del histórico comercio bilateral y llevarán una postura común en defensa de la selva amazónica a la próxima cumbre del clima que se hará en Egipto.
Los acuerdos fueron anunciados por los presidentes Gustavo Petro y Nicolás Maduro tras la reunión de dos horas que mantuvieron en Caracas, y que marcó el punto más alto de la recomposición de relaciones, rotas desde 2019 y recuperadas a partir de la llegada al Palacio de Nariño del exalcalde de Bogotá.
“Somos dos países que tenemos una marca en la historia para la hermandad y el entendimiento. Nuestro destino común está entre nuestros pueblos”, abrió Maduro la declaración ante la prensa, que Petro correspondió con la sentencia de que “el camino es el del buen vecino, y eso significa articular políticas comunes, un camino difícil, pero que hay que andar”.
Desde el Salón Ayacucho de la sede del Gobierno venezolano, Maduro destacó que se trató de “una jornada fructífera, intensa y extensa” con Petro y su delegación.
“Hemos conversado diversos temas de cooperación bilateral entre Colombia y Venezuela, dos países que tenemos un destino común”, resaltó Maduro, que, sin detallar el contenido de la conversación, reseñó que se habló del “cooperaciones entre (las empresas venezolanas) Monómeros, Pequiven y todo el trabajo que tiene que con los fertilizantes”.
El mandatario bolivariano dijo que entre ambos países existe “un conjunto de temas importantes que tenemos que trabajar de aquí en adelante relacionado con el tema comercial, seguridad fronteriza, lucha contra el narcotráfico y en materia de relaciones”.
Petro anunció luego que los dos países reconstruirán sus relaciones “a nivel inteligencia” para “golpear a los dueños del capital” que genera el narcotráfico como un paso para recuperar bla seguridad limítrofe.
“Ese camino empieza” por “reconstruir las fronteras, que están en manos de las mafias, de las organizaciones multicrimen”, juzgó.
“Es la expresión de un fracaso en algo que se llama uerra contra las drogasque empezó hace 50 años y nos dejó desestabilización democrática, un millones de muertos y territorios que se perdieron. Vamos a reconstruir las relaciones a nivel inteligencia, para golpear no al obrero del narco, sino a los dueños del capital. Son peligrosos para la estabilización política”, manifestó el colombiano.
Consideró Petro que la cuestión demanda “una gran conferencia latinoamericana de presidentes para examinar el fracaso de esa política” e insistió en la necesidad de que la extensa frontera colombo-venezolana “recobre su vigor comercial”.
Para ello, se organizará una reunión en Cartagena entre empresarios y comerciantes de los dos países “para que ellos mismos construyan sus lazos y sientan las bases de un comercio poderoso y popular”.