Una azafata de doble nacionalidad argentino-española viajaba en el avión de Air France que cayó al océano Atlántico en la madrugada del domigo último, confirmó ayer el cónsul argentino en Francia, Miguel Angel Hildmann.
Una azafata de doble nacionalidad argentino-española viajaba en el avión de Air France que cayó al océano Atlántico en la madrugada del domigo último, confirmó ayer el cónsul argentino en Francia, Miguel Angel Hildmann.
En diálogo con el canal C5N, Hildmann dijo que la identidad de la mujer es Clara Mar Amado, de 32 años, y que tenía doble nacionalidad porque era hija de argentinos.
Además de ella, un argentino viajaba como pasajero en el avión desaparecido, Pablo Dreyfus, el hijo del publicista Gabriel Dreyfus.
La azafata fue identificada ayer como la segunda víctima argentina del accidente del avión del vuelo 447 de Air France, que desapareció anteayer cuando recorría el trayecto entre Río de Janeiro y París, con 228 personas a bordo.
El cónsul sólo dijo que era una azafata de doble nacionalidad, pero al principio no brindó su identidad, "por respeto a la familia". Hildmann dijo al canal TN que "de toda la lista había un pasajero con pasaporte argentino y una tripulante argentina que era la azafata".
El diplomático dijo que la azafata "había adoptado la nacionalidad argentina por su padre" y residía "en Francia".
Clara Mar Amado vivió 15 años en Mendiolaza, 18 kilómetros al norte de Córdoba capital, donde aún residen su madre, Ana, y dos hermanas.
El cónsul no brindó su identidad, pero vecinos de Mendiolaza supieron de quién se trataba a través de un llamado a la radio LV3. La joven nació en España pero de muy pequeña llegó con sus padres a Córdoba, relataron. También comentaron que estuvo por última vez en Mendiolaza a fines de enero de este año en ocasión del casamiento de Gabriela, una de sus hermanas, y tras casi un mes de vacaciones retornó a Europa para continuar con su trabajo. En Francia residen su padre y otros tres hermanos.
Natalia Lescano, hermana de la azafata, manifestó ayer que la familia tiene "esperanzas" de que Clara Mar Amado pueda aparecer con vida, pero reconoció que la situación es "difícil". "No tenemos ninguna información adicional, sólo lo que sale en los medios", dijo la mujer, y reveló que el último contacto que ella había tenido con su hermana se produjo a principios de este año, "entre enero y febrero".
"No va a viajar nadie de la familia, estamos aguardando noticias, ojalá que haya alguna esperanza, pero sabemos que es muy difícil", señaló Natalia en declaraciones a radio Mitre Córdoba.
La mujer reveló que su hermana era azafata desde hacía diez años, que su residencia permanente era en Francia y recordó a la joven desaparecida como "una verdadera hermana". l (Télam, DyN y DPA)