Un matrimonio que era investigado en la Argentina y en Chile por narcotráfico fue ejecutado a balazos en su casa del departamento mendocino de Luján de Cuyo, cercano a la capital provincial.
Un matrimonio que era investigado en la Argentina y en Chile por narcotráfico fue ejecutado a balazos en su casa del departamento mendocino de Luján de Cuyo, cercano a la capital provincial.
Las víctimas fueron identificadas como Oscar Manuel Guzmán Peña, de 68 años, y Carmen del Pilar Honorato, de 65, ambas de nacionalidad chilena, asesinadas en su vivienda, situada en Aconcagua 2615, del distrito de Vistalba.
El director de Seguridad de Mendoza, Angel Fosatti, señaló que la pareja tenía antecedentes policiales. Si bien ninguo estuvo detenido en Mendoza, sí hay una investigación en curso de la Justicia Federal de esta provincia por drogas. Según averiguaciones, el matrimonio hacía unos cinco años que residía en Mendoza luego de haber cumplido una condena en Chile, donde fueron detenidos en mayo de 2003.
En base a la reconstrucción de los forenses, a la mujer le colocaron una almohada en la cara y le dispararon, mientras que a su marido lo ejecutaron con un tiro en la nuca en el patio de la vivienda.
En mayo de 2003, habían sido detenidos por personal de la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones chilena. Según la prensa de ese país, Guzmán era sindicado líder de una banda que pretendía instalar en la ciudad chilena de Peñalolén un laboratorio para procesar pasta base y convertirla en cocaína de alta pureza, la que luego sería vendida en los mercados europeos.
Según los diarios chilenos, "el grupo delictual estaba compuesto por cinco personas y era dirigido por Oscar Guzmán Peña, solicitado por narcotráfico internacional, quien iba a vender la cocaína en Europa a través de sus contactos con la mafia italiana". En aquel operativo, los efectivos lograron decomisar 55 kilos de sustancia ilícita.
Al respecto, la Jefa Nacional de Antinarcóticos chilena, Cristina Rojo, había señalado que "pensaban montar en Santiago un laboratorio para purificar la pasta base con la finalidad de llevarla con cien por ciento de pureza a Europa".
La pareja fue encontrada por un amigo del hijo de ambos, quien vive en Chile y le pidió que fuera a ver qué sucedía con sus padres, con quienes no podía comunicarse desde hacía varios días. El amigo, identificado como Matías Salomón y dueño de una conocida pizzería en Mendoza, arribó a la casa y, al no ser atendido por nadie, y observar que las luces estaban encendidas y un televisor funcionando, decidió llamar a la Policía.
Los efectivos ingresaron a la casa y encontraron muerta a la mujer vestida con ropa de cama y tendida en la cama boca abajo en uno de los dormitorios, mientras que en un patio interno encontraron tirado en el piso al hombre, también asesinado.
Lazo en Italia
La conexión del matrimonio Guzmán con las mafias internacionales de las drogas comenzó hace décadas cuando su hija Plaudina se casó en Milán con Salvatore Ciulla, quien murió mientras cumplía condena en una cárcel italiana junto a su hermano Cesare. En ese momento, la policía trasandina también detuvo a Carmen Honorato y a Oscar y Alejandro Guzmán, los dos últimos hijos del hombre asesinado.