Alrededor de 880.000 personas se ven forzadas a realizar trabajo esclavo en la Unión Europea (UE), según un informe de Parlamento Europeo adelantado ayer por el semanario alemán Der Spiegel.
Alrededor de 880.000 personas se ven forzadas a realizar trabajo esclavo en la Unión Europea (UE), según un informe de Parlamento Europeo adelantado ayer por el semanario alemán Der Spiegel.
La cifra, que incluye 270.000 víctimas de explotación sexual, figura en el estudio "CRIM" sobre criminalidad en la UE realizado por una comisión especial del Parlamento y que será aprobado el 23 de octubre.
El documento también detalla que unas 3.600 organizaciones criminales están activas en el bloque y provocan pérdidas de cientos de miles de millones de dólares en la economía europea.
Parte de los datos provienen de un informe de 2012 elaborado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La OIT entiende por trabajo esclavo cualquier forma de trabajo que una persona deba realizar bajo amenaza.
El lado más oscuro del crimen en la UE tiene diversas caras y mueve cifras millonarias.
Las bandas de tráfico de personas obtienen un beneficio de 25.000 millones de euros anuales (34.000 millones de dólares), según el documento del eurodiputado Salvatore Iacolino citado en Der Spiegel.
Entre tanto, el cybercrimen suma unos 290.000 millones de euros y el tráfico ilegal de órganos y de animales genera beneficios por entre 18.000 y 26.000 millones. El informe añade que en la UE hay unos diez millones de armas ilegales en circulación.
También representa una "amenaza seria" la corrupción: sólo en el sector público se registraron 20 millones de casos, indica el informe.