La directora gerenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, conversó con el secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, sobre la posibilidad de utilizar Derechos Especiales de Giro (DEG) estadounidenses para rescatar al gobierno de Javier Milei. Así lo tuiteó en la previa a la reunión que el ministro de Economía, Luis Caputo, mantendrá con su colega norteamericano.
Caputo viajó de urgencia a Washington para adelantar el auxilio financiero del gobierno de Donald Trump, prometido en principio para después de las elecciones del 26 de octubre.
La semana pasada, el jefe del Tesoro anunció una negociación para acordar un swap, un préstamo o un programa de compras de bonos argentinos y logró calmar por unos días al mercado. Pero el jueves, el mismo funcionario estadounidense aclaró durante una entrevista que los alcances del salvataje serían limitados y que no implicarían el desembolso de dinero.
Frente a lo que se avecinaba como una nueva jornada negra para los títulos de deuda, Caputo se apuró a informar que viajaría a Estados Unidos para activar algún tipo de ayuda. Se habla ahora de la posibilidad de que Bessent intervenga comprando papeles para hacer subir su cotización. El secretario del Tesoro es del riñón de Wall Street y tiene interés en salvar a los fondos de inversión de ese origen que participaron de la bicicleta financiera en Argentina.
En la previa del encuentro con el ministro argentino, que se concretaría el sábado, el titular del Tesoro se reunió con Georgieva. Fue ella quien difundió el contenido de la charla a través de un posteo en X. “Excelente conversación con Scott Bessent sobre la coordinación del apoyo a las reformas integrales de Argentina. Conversamos sobre los amplios planes de asistencia financiera de EEUU, incluyendo el uso de las tenencias estadounidenses de DEG. Espero con interés las conversaciones con las autoridades argentinas en los próximos días”, indicó.
Los DEG son un activo de reserva internacional creado por el FMI en 1969. No es una moneda ni un derecho frente al FMI, sino un activo contable que los países miembros pueden usar como parte de sus reservas o intercambiar por divisas de libre uso (dólar, euro, yen, libra, yuan).
Los mercados
Por la expectativa del viaje, los bonos en dólares registraron firmes ganancias el viernes. Los soberanos anotaron fuertes subas, de hasta 5%, lideradas por el AL35. El riesgo país se ubicó en la zona de los 1.165 puntos básicos.
En sintonía, los ADRs de empresas argentinas en Wall Street operaron con mayoría de subas. En cambio, el índice S&P Merval de la Bolsa porteña cedió 0,2%. En dólares, ganó un 1,5%, debido al nuevo retroceso del CCL.
“Argentina está atravesando un momento muy delicado en su política cambiaria; sin embargo, la esperanza de la ayuda de Estados Unidos logró darle un segundo aire”, dijo Nicolás Cappella, de IEB.
Las cosas tampoco están sencillas en el país del norte. El gobierno de Estados Unidos entró en un nuevo cierre administrativo tras vencer el plazo para que el presidente Trump y el Congreso alcanzaran un acuerdo de financiamiento antes de la medianoche del 1º de octubre.
El ritmo del dólar
En el mercado cambiario, el dólar oficial cerró a $1.424,5 en el segmento mayorista, al igual que lo hizo en la rueda del jueves. Fuentes del mercado señalaron que en los $1.425 apareció una orden cercana a los u$s 200 millones, presuntamente por parte del Tesoro.
Es por ello que, en la city, denominaron a los $1.425 como “la banda de la banda”, ya que es la cotización en la cual el Tesoro vende dólares para contener la suba del tipo de cambio.
Cabe resaltar que el techo oficial de la banda se encuentra en los $1.482,2 y que, con la cotización de este viernes, está a 4% de ese limite. Por último, en el segmento contado se operaron más de u$s 455,1 millones.
Al respecto, el economista Gustavo Ber indicó que a pesar de esta “muralla” por parte del Tesoro, que se vio en las pantallas de dólar mayorista, los operadores “comenzaron a observar algunas ofertas privadas y un mayor respiro desde la demanda”, lo que frenó el drenaje de divisas y la brecha, a la espera de novedades del respaldo financiero de EEUU.
No obstante, el especialista entendió que continúa sostenida “la expectativa de que poselecciones el régimen cambiario pudiera migrar hacia uno de flotación más libre”, ya que el apoyo externo no podría ser utilizado en su totalidad para defender compras de ahorristas. En tanto, crece el clamor entre los inversores para avanzar con decisión en un programa de compra de reservas, que permitiría comprimir el riesgo país.
A nivel minorista, el dólar cerró a $1.454,86 para la venta en el promedio de las entidades financieras que publica el Banco Central. En el Banco Nación (BNA) la divisa lo hizo a $1.450 para la venta.