A través de un decreto de reciente publicación, el gobierno provincial adjudicó la licitación para estabilizar la cascada del arroyo Saladillo, tarea necesaria para evitar el colapso del puente Molino Blanco, que une Rosario con Villa Gobernador Gálvez. Se trata de la principal obra pública que la Casa Gris desarrolla en la ciudad (junto con el acueducto): supone una inversión cercana a los $3.000 millones, financiada con partidas del presupuesto nacional.
En caso de concretarse según lo previsto, los trabajos deberán estar concluidos para 2023. En tal caso, se podrá afirmar que el gobernador Omar Perotti logró dar en el clavo con una tarea que varios de sus antecesores no. Vale recordar que durante los años del ex gobernador Hermes Binner el gobierno provincial había llegado a contratar una empresa para ejecutar los trabajos de estabilización, pero el proceso se detuvo tras un planteo de vecinos amparado en la ley 10.000 que obtuvo aval judicial. Durante la gestión de Miguel Lifschitz el tema registró avances, incluso contratando un estudio especial al Instituto Nacional del Agua, pero las obras no se llegaron a licitar.
La obra estuvo en la mira de la actual gestión desde sus inicios. En 2020, el Ejecutivo logró que el Consejo Federal de Inversiones (CFI) contrate una consultoría privada (la porteña Serman & Asociados) para elaborar un nuevo proyecto, la base sobre el cual se elaboraron dos pliegos, cuyas ofertas económicas se conocieron durante el año pasado. "Los distintos proyectos van cambiando en función de que la cascada avanza. Entonces lo que en algún momento fue lo adecuado ahora no lo es, y así sucesivamente", habían explicado oportunamente funcionarios provinciales sobre la iniciativa.
El pasado 10 de junio, Perotti firmó el decreto 977, que adjudicó a la unión transitoria (UT) conformada por Mundo Construcciones, Supercemento y Basaa los trabajos para la denominada segunda etapa -la más pesada dentro del actual esquema-, por un monto que asciende a $2.776.229.864,88, para desarrollar una pantalla de hormigón armado.
Según indicaron a este medio, durante junio la UT ya recibió el anticipo financiero correspondiente a la obra, por lo que en estos primeros días de julio están terminando de montar el obrador en la margen sur del arroyo, en terrenos ubicados en el extremo suroeste del municipio de Rosario.
La primera etapa, en tanto, se había licitado con anterioridad y tenía un presupuesto oficial por $949.995.878,53. En ese caso los trabajos tenían un plazo de obra de ocho meses y contemplaban el reacondicionamiento estructural del puente Molino Blanco, que vincula la ciudad con Villa Gobernador Gálvez.
"Es una obra compleja, pero entendemos que es un momento importante para hacerlo. La necesidad de protección de la conectividad, del puente del Molino Blanco, y la necesidad de frenar el retroceso de la cascada, llevan a iniciar las tareas lo antes posible", había dicho el propio Perotti al presentar el proyecto, en agosto de 2021. En esa oportunidad también estaba el actual senador nacional Marcelo Lewandowski que, consultado por este medio, valoró positivamente el avance de los trabajos: "Es una de las obras en las que primero insistí desde mi banca en el Senado provincial", indicó.
Vale recordar que la última "luz roja" climática había aparecido en 2017, cuando a raíz de las fuertes lluvias se generó una crecida del arroyo (que nace en la localidad de Venado Tuerto) que amenazó la seguridad del puente. Antes, en 2015, las autoridades de la Municipalidad de Rosario habían advertido que la quebrada se había corrido "entre 80 y 100 metros". Los problemas surgen no solo por la estabilidad del puente, sino también porque en cercanías a la cascada se encuentra el asentamiento La Paloma, en el que viven 110 familias.
Aportes de Nación: la deuda con el parque Sur
El citado decreto deja constancia que el gasto que demanda la segunda etapa de obras se financia con partidas del Ministerio de Obras Públicas nacional, según un convenio firmado el pasado 20 de abril. Lo mismo había ocurrido con otras dos grandes obras que se desarrollan en el área metropolitana: la nueva fase del acueducto y el gasoducto Gran Rosario.
El que no corrió la misma suerte es el municipio de Rosario ya que, según se había anunciado oportunamente (en el marco del evento Capitales Alternas, de abril de 2021), Nación aportaría más de $300 millones para remodelar integralmente el Parque Regional Sur. La iniciativa venía a saldar una deuda histórica con ese gran pulmón verde de la zona sur rosarina, pero según confirmaron fuentes oficiales el financiamiento se cayó.