Villa Constitución. — El Concejo Municipal de Villa Constitución estudia
por estas horas un proyecto para que el Ejecutivo elabore y ponga en marcha un plan estratégico
para la ciudad. La iniciativa parte de la certeza de que la falta de ese instrumento ha provocado
que en las últimas décadas Villa Constitución haya tenido un crecimiento desorganizado, por la
falta de programación y determinación de prioridades.
"Es imprescindible que nuestra ciudad cuente con un plan
estratégico propio, que determine sus políticas y acciones en cuanto a su desarrollo económico,
social , sanitario, urbano, turístico y cultural, entre otros aspectos", sostuvo Gustavo Báez,
autor de la iniciativa que está siendo analizada en comisiones por el Concejo villense.
A su juicio, deberá ser "una decisión de los propios
villenses determinar qué tipo de ciudad quieren y qué sectores se deben potenciar, todo ello en el
marco de una integración, complementariedad y acuerdos con la distintas ciudades de la futura
región propuesta desde el gobierno provincial".
Un plan sin ejecutar. En la década del 90, la ciudad invirtió más de 70 mil
dólares en la formulación de un plan elaborado por una consultora española contratada a ese
efecto.
Sin embargo, ese plan nunca se pudo implementar, y más de
diez años después, una nueva realidad económica y social lo ha tornado caduco en la mayoría de sus
aspectos. Sólo podrían utilizarse algunos datos estadísticos, encuestas y propuestas que todavía
tienen vigencia.
"Nuestra ciudad se ha caracterizado en los últimos años por
su crecimiento desorganizado y por la falta de programación y determinación de prioridades. Esto se
ha visto tanto en la obra pública, como en otros sectores estratégicos: el perfil económico, la
salud pública, el turismo, la política cultural y el ordenamiento urbano", advirtió Báez.
En etapas. De acuerdo al proyecto, la formulación del plan estratégico villense
deberá cumplimentarse en varias etapas: prediagnóstico, convocatoria, diagnóstico participativo,
definición de objetivos y líneas estratégicas, formulación de proyectos, lanzamiento, aprobación en
audiencia pública y puesta en marcha.
"El plan debe convertirse en un patrimonio de la comunidad,
desde el cual sea posible orientar el futuro de la ciudad, basándose en las premisas fundamentales
de igualdad de oportunidades, sustentabilidad ambiental, transformación territorial y crecimiento
económico", destacó el autor.
La idea es que se considere la participación de la
comunidad como un elemento prioritario en la gestión del desarrollo. "Este postulado encuentra su
fundamentación en la necesidad de modernización de las políticas públicas del municipio", remató el
concejal.
Los planes estratégicos se pusieron en boga entre los 80 y
los 90, a partir de experiencias europeas y brasileñas, que buscaron un desarrollo sustentable y
planificado de las ciudades. Ahora, el desafío es la confección de planes regionales.
En Rosario, por caso, el PER comenzó a trabajarse en 1996 y
su diseño culminó en 1998, aunque inmediatamente después empezó el diseño del Plan Estratégico
Metropolitano.