Hugo Moyano encabezará hoy el congreso en que será reelecto por un sector sindical para asumir su tercer mandato como secretario general de la CGT, en medio de su conflicto con el gobierno nacional y de la fractura gremial con quienes promueven la jefatura del metalúrgico Antonio Caló.
"La CGT es una sola. Hay otro grupo que se ha tratado de conformar y no puede sorprender a nadie", reiteró Moyano al renovar sus críticas contra sus rivales que el 3 de octubre realizarán otro congreso para designar a Caló al frente de la central obrera.
El congreso del moyanismo se realizará hoy, desde las 9, en el microestadio de Ferrocarril Oeste, en avenida Avellaneda y Martín de Gainza, en el barrio porteño de Caballito.
Por su parte, Caló rechazó las críticas de Moyano y subrayó que en octubre se convertirá en el secretario general de la CGT que agrupará a los "gremios más importantes de la Argentina".
"Quiero una CGT única. Si la unidad del movimiento obrero pasa por que Caló se baje de la candidatura, Caló se baja", aseguró el metalúrgico aunque luego aclaró que "si del otro lado, Moyano no se quiere bajar de la candidatura, Caló tampoco se baja".
Caló recordó que Moyano asumió en 2004 y fue reelecto en 2008 al frente de la central obrera con el respaldo de los denominados "gordos" y ahora reniega de esos dirigentes. "Lamento que Moyano baje a ese nivel para hablar de otro dirigente gremial", indicó al ser consultado sobre las críticas del jefe de los Camioneros contra sus rivales.
Al respecto, agregó que "él (Moyano) asumió en 2004 como secretario general de la CGT, estuvo con todos los compañeros y ahora reniega de los «gordos». En 2008 también lo votaron los «gordos» y ahora reniega. Nunca hay que renegar de un dirigente gremial".
Moyano volvió a ignorar las quejas de sus rivales y hasta planteó sus críticas a través de una solicitada de la CGT en la que afirma que el consejo directivo que anteayer conformaron sus opositores para llamar a elecciones estuvo integrado por dirigentes "muertos, detenidos y renunciantes" (ver recuadro).
Dádivas. Además, el jefe cegetista aseguró que ahora los antimoyanistas están "esperando alguna dádiva del gobierno" y recordó que él antes "no los podía sostener en la CGT por cómo lo criticaban" al Ejecutivo nacional.
"Ahora resulta que son los ultra pro gobierno, los últimos cristinistas. Esto fortalece nuestra actitud, que siempre ha sido la misma. Cuando los gobiernos dan respuestas a los trabajadores, por supuesto que acompañamos, pero cuando empiezan a faltar las respuestas, nos empezamos a alejar", explicó.
En tanto, Pablo Moyano reveló que el secretario general de la CGT se reunió con varios miembros del consejo directivo de la central obrera para definir detalles sobre el proceso que se realizará hoy en Ferro.
Al respecto, el hijo del titular de la CGT explicó que se realizará primero un congreso extraordinario que aprobará la memoria y balance de la CGT y la incorporación de más de un centenar de gremios que pidieron revistar en la confederación y, posteriormente, el congreso ordinario que elegirá a la nueva conducción.
Otro de los dirigentes gremiales que apuntó ayer contra Moyano fue Andrés Rodríguez, de UPCN, quien afirmó que "la mayoría del movimiento sindical quiere la caducidad del mandato" del gremialista Camionero en la central obrera. Agregó que la gestión de Moyano "ya fue" porque "desde hace un tiempo a esta parte generó una dispersión de gremios por realidades que no son las propias de un secretario de la CGT".
En cambio Gerardo Martínez (Uocra), mas conciliador, señaló que "siempre hay tiempo para llegar a un consenso, y más aún cuando se trata de la representación institucional de los trabajadores".