Un hombre fue condenado a ocho años de cárcel por haber asesinado a puñaladas a Guillermo David Obiedo, quien era la pareja de su ex mujer, en diciembre de 2018. Se trata de Miguel Angel Martínez, de 41 años, quien admitió la autoría del homicidio en un juicio abreviado acordado entre el fiscal Luis Schiappa Pietra y la defensa del imputado, que estaba detenido desde el año pasado. El acuerdo fue homologado días atrás por el juez de primera instancia Gonzalo López Quintana.
Obiedo tenía 45 años, vivía en el barrio 7 de Septiembre y trabajaba como vendedor ambulante. El 29 de diciembre de 2018 había salido con un amigo a vender bolsas de residuos por el barrio Ludueña. Sobre las 19.30 decidió parar a descansar y se sentó con su amigo en la puerta de un kiosco de Humberto Primo y pasaje Puelche, en la esquina de la escuela Luisa Mora de Olguín.
En eso estaba Obiedo cuando pasó por allí un hombre en moto que se detuvo al reconocerlo. “Por fin te encuentro. ¿Qué hacés David, cómo andás? ¿Te acordás de mí?”, sostuvo el motociclista mientras bajaba de su rodado y se acercaba al vendedor ambulante, quien alcanzó a reconocerlo: “Miguel, ¿cómo andás?”, le dijo.
La conversación que fue narrada por el testigo que estaba trabajando con Obiedo continuó con esta frase de la víctima: “Miguel, pará, ¿qué hacés?”. Entonces el compañero de Obiedo se dio vuelta a ver qué pasaba y vio a David con su cuello ensangrentado mientras el agresor, “flaco y bajito”, lo seguía apuñalando con una cuchilla de carnicero.
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Obiedo pudo incorporarse y caminar unos 40 metros hasta que cayó al pavimento donde murió minutos más tarde “desangrado en la vereda”, según comentaron vecinos que aludieron al pedido de una ambulancia que jamá llegó.
Pasaron más de dos años hasta que Martínez fue detenido en marzo de 2021, cuando lo identificaron en un control policial de rutina y se estableció que tenía un pedido de captura por el homicidio. Entonces se supo que Obiedo estaba en pareja con una mujer que antes había estado en una relación con Martínez. Y que éste, descripto como “celoso y violento”, le había dicho a esa mujer que iba a matar a David cuando se enteró de que estaba en pareja con éste. Incluso los había amenazado a ambos con una escopeta, circunstancia de la que pudieron salir airosos. Luego el agresor se fue a vivir a otra provincia y el conflicto pareció esfumarse.
Finalmente el crimen de Obiedo se resolvió con un procedimiento abreviado en el que Martínez admitió haberlo asesinado y pasará ocho años tras las rejas como autor de un homicidio simple.