Efectivos de la División Judiciales de la provincia continuaron ayer partiendo el terreno en el barrio La Granada en la búsqueda de otros túneles o conductos presuntamente usados por parte de la llamada banda de Los monos. El lugar, la antigua casa en la que vivía parte de la familia Cantero, es ahora un baldío perforado. En dos días las máquinas retroexcavadoras dejaron a cielo abierto no sólo los dos túneles con una extensión de 26 metros, sino también dos pozos ciegos que había en la antigua vivienda. Seis fueron las nuevas excavaciones en una acción que procuró, además, descubrir si algunos de los túneles conectaban con la desembocadura de los desagües pluviales. Pero ayer no se encontraron nuevos pasadizos.
La fiscal Cristina Herrera expresó que al llegar ayer a la mañana operarios y policías se encontraron con que los túneles descubiertos el martes habían sido tapados. "El que taparon fue el túnel que salía de la casa de Roberto V", dijo la fiscal. Esta es la vivienda donde se descubrió el primer conducto que, según la sospecha de los acusadores, era utilizado por la banda como vía de escape y también para ocultar dinero y droga.
Los operarios, que trabajaron bajo la atenta mirada de los efectivos, perforaron ayer cerca de dos metros, ya que se supone que a esa profundidad se debería encontrar el piso del posible conducto. La búsqueda no era azarosa sino guiada por el aporte de testimonios obtenidos por los investigadores.
"Tenemos datos de la existencia de otros túneles", señaló un oficial que trabaja en la causa. "Pudimos detectar dos clases de túneles distintos. El primer tipo son varios tramos no unidos que se conectan por la superficie, se sale y se entra en una misma línea que tiene interrupciones. El segundo tipo es un solo conducto con respiraderos y salidas, pero por el que se puede circular sin necesidad de salir a la superficie", añadió.
Prueba vs impacto. ¿Cuál es el valor acusatorio que tiene el hallazgo del túnel? Según la fiscal Adriana Camporini esta novedad "no supone una imputación nueva pero es una evidencia más de la capacidad operativa que tiene la banda investigada". El fiscal de Cámaras Guillermo Camporini agregó que la División Judicial tiene información que refiere la existencia de ductos mucho más largos. "Lo importante para nosotros es que con este hallazgo, el mito en torno al poder organizativo de los Canteros ha caído y se convirtió en realidad", afirmó el funcionario.
"Son túneles muy bien construidos, con condiciones que permitían el escape de personas, el acopio de armas, de dinero, de otros elementos provenientes de la actividad ilícita de los narcos. Demuestra la capacidad organizativa y operativa de la organización ilícita que se investiga. No hablamos de un grupito de personas que se reunían de vez en cuando para hacer algo. Hay una organización ilícita con distintos grados de responsabilidades y con capacidad de acción muy importante", remarcó Camporini.
El abogado defensor de la familia Cantero, Carlos Varela, rechazó que el hallazgo complique a sus clientes. "Primero. Esos túneles no fueron diseñados ni construidos por la familia. Segundo. La adquisición de esas propiedades fue posterior. Y tercero: superada cualquiera de las dos hipótesis anteriores, aún cuando hubieran sabido de la existencia de esos túneles, creemos que no se puede hacer un juicio de valor como hace el doctor Camporini. Los hechos deben probarse. Debe probarse que los túneles fueron construidos o utilizados por los Cantero y en todo caso si esa existencia configura algún delito", dijo a LT8.
La fiscal Herrera dijo ayer a la tarde que la construcción "no parece antigua por lo que se puede percibir, no solamente en el revoque de las paredes sino la sequedad de la tierra". La funcionaria consignó: "Este túnel no lo construyó un albañil inexperto, tiene una planificación y está diseñado de manera que una persona puede alojarse allí y con aislación para que no se humedezca".
Las versiones que circulaban entre los policías ayer es que varias viviendas de esa misma manzana tienen en su interior las tapas que conectan los túneles. Pero habrá allanamientos solamente ante evidencia certera. "No vamos a romper todas las casas por las dudas", sostuvo una fuente judicial.
Lucía llamativo que los vecinos del barrio, y por ende conocidos de los Cantero, no se inmutaban ante el despliegue policial de decenas de efectivos, camiones antidisturbios y varios patrulleros. La gente continúa con su vida sentada en la vereda, mate de por medio y sin apuro.