Un fiscal de Chaco pidió que se eleve a juicio oral la causa que se le sigue al abogado Carlos Salvatore, condenado a 21 años de prisión por la causa "Carbón Blanco" y acusado de liderar una organización dedicada a blanquear los millonarios recursos provenientes del contrabando internacional de cocaína.
El pedido incluye a cuatro familiares directos e integrantes del círculo íntimo del profesional, quienes para los investigadores formaron parte de las distintas operaciones destinadas a darle apariencia de licitud a las ganancias obtenidas a partir del tráfico de estupefacientes.
La solicitud fue formulada por el fiscal federal de Roque Saénz Peña, Carlos Sanserri, a quien acompañaron sus colegas de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), Gabriel Pérez Barberá y Laura Roteta.
Para los representantes del Ministerio Público Fiscal, durante la instrucción de la causa "se constató la existencia de una organización" comandada por Salvatore "que generó un entramado financiero, empresarial e inmobiliario con ramificaciones por el país y el extranjero dedicado a colocar, en el mercado local, el dinero que provenía de su actividad como narcotraficante".
El 17 de septiembre de 2015 el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Resistencia condenó a Salvatore a 21 años de prisión como organizador de una asociación ilícita que envió más de una tonelada de cocaína a Portugal y España en contenedores con carbón vegetal. Los otros cuatro imputados por el hecho recibieron penas de entre 12 y 19 años, entre ellos el fundador del Club Real Arrroyo Seco, Patricio Gorosito.
En forma paralela, Salvatore está procesado por el envío en 2005 de 1,2 toneladas de cocaína desde la localidad de Campana hacia Valencia (España), también disimulada en un cargamento de carbón vegetal.
El líder de la operación "Carbón blanco" enfrenta otros cuatro procesos judiciales por contrabando internacional en los que ocupó el rol de organizar, dirigir y financiar los embarques que partían desde Campana, Zárate o Rosario a Europa.
Empresas fantasma
En 2014 la Procelac presentó una denuncia en la Fiscalía de Roque Saénz Peña por lavado de activos provenientes del contrabando debido a reportes emitidos por la Unidad de Información Financiera (UIF) y que daban cuenta de movimientos injustificados a través de un conjunto de sociedades comerciales tales como Lugin SRL, Saint Maxime SA, Katrine SA y otras en las que participaban Salvatore o sus familiares..
Precisamente, entre los demás implicados en la maniobra están la esposa del abogado, Silvia Vallés Paradiso; su suegro, Santiago Vallés Ferrer; su hija, Carla Yanina Salvatore; y su socio, Ricardo Gassan Saba, para quienes también se requirió la elevación a juicio.
Las pruebas recolectadas permitieron acreditar la constitución de varias sociedades comerciales para ocultar el origen ilícito de los fondos, destinados a emprendimientos inmobiliarios, adquisición de propiedades y autos, inversiones financieras y la realización de películas.
Una película infantil
Por ejemplo se conformó la "Fundación Salvatore para el Estudio e Investigación de Enfermedades, Tratamientos y Recuperación de Pacientes", que tenía como objetivo realizar actividades académicas, de diagnóstico, rehabilitación y reinserción social de pacientes, entre otras.
Y en 2005 se constituyó la firma CS Entertainment SRL, que asociada a "Manos Digitales Animation Studio A" coprodujo el largometraje infantil "Plumíferos, aventuras voladoras", con la participación de los actores Luisina Lopilato y Mariano Martínez, quienes le dieron voz a los personajes animados. La realización del film se logró mediante una inyección de 700.000 dólares, de acuerdo a los datos recolectados en la investigación.