Un hombre de 39 años baleado la noche del sábado en la zona noroeste de la ciudad murió ayer a la mañana en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. Se trata de Diego Alberto Salega, quien fue interceptado por un hombre que le disparó varias veces para luego darse a la fuga en un auto.
Fuentes policiales y judiciales confirmaron que por el hecho hay un sospechoso identificado que hasta anoche al cierre de esta edición permanecía prófugo.
En ese contexto tres personas fueron demoradas a bordo de un auto a partir de un señalamiento de vecinos. Se estableció que el vehículo, en el que se halló una vaina servida, tenía pedido de secuestro activo por lo cual se les formó una causa por esa cuestión. Sin embargo, si bien uno de los detenidos tendría relación con el presunto homicida, no fueron imputados por el crimen y recuperaron la libertad.
Según la información preliminar, cerca de las 20.30 del sábado Salega se encontraba en la puerta de su casa de Irala al 4200, en el barrio Cristalería. Según expuso un testigo de identidad reservada que caminaba junto con la víctima, por el lugar pasó un joven identificado como Lucas E. que se puso a hablar con Diego hasta que en un momento comenzó a correrlo y le disparó.
Mientras el agresor se escapaba en un auto —sería un Renault Logan negro— Salega fue trasladado al Eva Perón, donde ingresó con heridas de arma de fuego toraco abdominal con perforación de un pulmón y parte del hígado destrozado. El hombre de 39 años fue operado y quedó internado en grave estado. Fuentes judiciales confirmaron que murió ayer a la mañana.
En ese contexto, cuando llegaron a la zona efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) algunos vecinos les indicaron que en un Fiat Uno blanco estacionado en las inmediaciones se encontrarían los autores del hecho. Los uniformados identificaron a los ocupantes y requisaron el vehículo, donde encontraron tres cartuchos calibre 9 milímetros y una vaina servida. Además establecieron que el auto registraba un pedido de secuestro.
Esas tres personas fueron identificadas como Oscar C., de 45 años; Favio R., de 36, y Melani E., de 24 y presunta hermana del principal sospechoso. Sin embargo, al establecerse que en principio no habrían participado del homicidio quedaron a disposición de la Fiscalía de Flagrancia y recuperaron la libertad.
Al cierre de esta edición personal policial llevaba adelante medidas ordenadas por el fiscal de Homicidios Adrián Spelta en procura de localizar al sospechoso y hallar el arma de fuego empleada en el mortal ataque.