A Marcos Guenchul todos sus vecino lo llamaban afectuosamente por su nombre de pila. Era socio junto a un tocayo suyo del gimnasio "Progress Fitnes", ubicado en Mendoza al 4900. La noche del martes su novia lo llamó al local y le dijo que ya estaba la cena preparada. Entonces preparó sus cosas y a las 21.30 llegó a la esquina de Mendoza y Sucre para esperar la llegada de la línea K. Pero como el trolebus no llegaba, por alguna razón que aún se desconoce comenzó a caminar por Sucre en dirección a San Juan. A media cuadra alguien lo emboscó y sin mediar palabras le disparó un tiro a la cabeza. La herida fue brutal, el muchacho quedó en coma y con muerte cerebral. Ayer al mediodía los médicos del Hospital de Emergencia Clemente Alvarez (Heca) procedieron judicialmente a interrumpir la asistencia mecánica respiratoria y sus familiares decidieron donar sus órganos.
El muchacho tenía un bolso en bandolera y un teléfono celular que ahora está en manos de la policía para ser peritado. El asesino no le robó nada de lo que tenía. Por eso, las pistas de la pesquisa giran en torno a alguna cuestión interpersonal o bien un problema al que él no le dio la importancia necesaria.
Los investigadores, además, descartaron otras cuestiones ya que Marcos nunca tuvo antecedentes penales. "Era un chico magnífico y muy correcto con las chicas que íbamos al gimnasio. No sé que habrá pasado, pero si tenía problemas no era por su carácter, era muy buena persona", comentó una joven que es asidua asistente del gimnasio.
Todo pasó a una hora en la cual, pese al frío, algunos vecinos volvían de trabajar o estaban a punto de cenar. "No se escucharon ni gritos ni golpes. Sólo dos tiros y un auto que se alejó. Cuando lo vimos, el chico aún se movía y tenía la capucha de un buzo de gimnasia puesta. No sé cómo, pero la policía llegó al instante y también la ambulancia que lo llevó al hospital", dijo un vecino. Cuando esa ambulancia llegó al Heca los médicos de guardia le diagnosticaron una herida de bala en el cráneo y determinaron su estado crítico e irreversible.
El fiscal Adrián Spelta, a cargo de la causa, ordenó el relevamiento de cámaras de vigilancia públicas y privadas que se encuentran tanto por Mendoza como por Sucre. Y descartó de momento un hecho de robo ya que la víctima tenía en su poder la billetera y el celular. Justamente es con el análisis de ese móvil se iniciará la pesquisa judicial.
"Cuando tengamos los registros del celular y de las cámaras podremos acercarnos a un análisis de lo sucedido. En las cámaras veremos movimientos de autos u otros vehículos al momento del crimen". aseguró Spelta.
Además, investigadores de la Policía de Investigaciones iniciaron una serie de averiguaciones con familiares de la víctima para conocer qué situaciones atravesaba Marcos para terminar como terminó.
En tanto, ayer los vecinos de la zona donde se ubica el gimnasio de Marcos convocaron a un corte de calles para mañana a las 13 para reclamar mayor protección. "Cansados de la inseguridad reinante en el lugar, hundidos en la impotencia y ante el robo a punta de pistola a una joven con su bebé, robos de bicicletas y la muerte de Marcos, nos autoconvocaremos para un corte de calle el viernes a las 13 en Sucre y Mendoza", expresaron en un comunicado que circuló por redes sociales.