Francisco Mateo Alvarez, el acusado de asesinar de un escopetazo al kayakista
rosarino Ariel Pasquini el 14 de febrero pasado en las islas, declaró que no tuvo intenciones de
matar al muchacho y que se le escapó un tiro al mantener una fuerte cusión con otros vecinos del
mismo paraje. También contó que nunca tuvo problemas con el muchacho fallecido porque directamente
no lo conocía.
Alvarez, de 72 años, se encuentra detenido en la seccional de policía de la
localidad entrerriana de Victoria, que tiene jurisdicción en las islas ubicadas frente a Rosario.
El crimen ocurrió el sábado 14 de febrero en una zona situada frente al estadio de Rosario Central.
Pasquini y un grupo de amigos habían cruzado el río Paraná en kayak para pasar un día al aire libre
en un sector donde habitualmente lo hacían.
En un momento se inició una discusión entre Alvarez, al parecer un viejo
habitante de la zona, con otros lugareños. El motivo de la pelea fue la delimitación de terrenos.
Según contaron amigos de la víctima, el joven rosarino se encontraba con su novia en un lugar
cercano desde donde escuchó los gritos. El muchacho y su pareja eran ajenos a la disputa, pero
igual Pasquini decidió acercarse para observar qué era lo que ocurría.
Desenlace. Unos segundos después, Pasquini recibía un disparo de escopeta en la
espalda. Prefectura Naval pudo auxiliarlo y cruzarlo rápidamente a Rosario, pero la víctima
falleció horas después en el Hospital Clemente Alvarez. El autor del disparo quedó detenido,
imputado de homicidio a disposición del juez de Instrucción de Victoria, Alejandro Calleja. También
fue secuestrada el arma, una escopeta calibre 16. Cuarenta y ocho horas después, el acusado fue
trasladado al Tribunal para ser indagado por el magistrado, pero en principio se abstuvo de
declarar.
Esta semana, Alvarez anticipó a través de su abogado, Juan José Azpeitía, su
decisión de contar su versión de la historia que terminó en tragedia. La medida procesal, que duró
un par de horas, se realizó el martes, según contó a este diario el defensor. "Alvarez hizo uso de
su derecho de defensa que es la declaración indagatoria y narró su versión de los hechos", agregó
el profesional. El hombre le dijo al juez que no tuvo intenciones de matar a Pasquini.
"Dijo que se le escapó un tiro. Fue un accidente. Que no vio al muchacho que
estaba medio tapado entre unos yuyales altos y que en medio de una discusión se le disparó el arma.
Recién se dio cuenta de la presencia del muchacho en el lugar cuando, tras el estampido de su
escopeta, se escucharon los gritos de la víctima", sostuvo el letrado.
Azpeitía contó a LaCapital que su cliente vivía en una situación de "nerviosismo
constante desde el año 2006 cuando comenzó a tener problemas con unos hermanos que son vecinos del
lugar". El problema se había originado por la demarcación o delimitación de unos terrenos.
Libertad. "Parece que estas personas querían quedarse con una porción de
terrenos que mi cliente reclama como suyos. Alvarez contó que lo hostigaban permanente y que aquel
día se produjo una discusión por la cual tomó su arma porque se sintió amenazado. Pero Pasquini no
tenía nada que ver. Mi cliente dijo que nunca lo vio porque el muchacho estaba en un lugar de yuyos
altos", remarcó el letrado.
Azpeitía adelantó que en los próximos días pedirá la excarcelación de Alvarez al
considerar que la muerte del kayakista fue consecuencia de un episodio accidental. Debido a la
declaración del acusado, el juez Alejandro Calleja se tomará unos días más para resolver la
situación judicial del presunto homicida. Puede dictarle falta de mérito, procesarlo o bien
sobreseerlo.
Querellantes
Los familiares de Ariel Pasquini, el rosarino asesinado de un disparo el 14 de
febrero en la isla, se constituyeron en querellantes. Lo hicieron el miércoles a través de una
presentación formal realizada por dos abogados de Paraná ante el juez de la causa Alejandro
Calleja. Eso les permitirá una participación activa en el proceso penal.