El subjefe de la Unidad Regional II de Policía, Luis Bruschi, negó que se hayan borrado rastros y pruebas tras el incendio que se produjo el pasado viernes en la alcaidía y que dejó tres víctimas fatales.

El subjefe de la Unidad Regional II de Policía, Luis Bruschi, negó que se hayan borrado rastros y pruebas tras el incendio que se produjo el pasado viernes en la alcaidía y que dejó tres víctimas fatales.
El defensor general de Santa Fe, Gabriel Ganón, había afirmado que “se borraron los rastros” del incidente y se incumplieron protocolos internacionales, pero de inmediato el subjefe de la fuerza en Rosario salió a negar las acusaciones.
Bruschi dijo que la limpieza del lugar se hizo recién cuando "se terminaron las pericias correspondientes, según marca el protocolo”.
Añadió que la investigación sigue su curso y “sería aventurado decir una hipótesis en particular” sobre el origen del conflicto en la alcaidía, aunque confirmó que “existió una pelea y de ahí en más las causas entre las personas detenidas van a salir de las declaraciones de todos los involucrados”.

