La Policía de Investigaciones realizó un trabajo de levantamiento de un cuerpo hallado en el predio de una distribuidora de galletitas ubicado en Presidente Perón al 6900, donde fue hallado un cadáver. El cuerpo estaba boca abajo y tenía puesta una capucha. Se confirmó que el cuerpo pertenecía a Ruben S. y de 31 años y que faltaba de su domicilio desde el domingo pasado. Al momento del hallazgo fue identificado por familiares y se destacó que no presentaba ningún tipo de lesión o herida que pueda presumir que se trató de un asesinato. Esos primeros indicios fueron confirmados luego de la primera revisión del médico forense y el pre informe de autopsia
El lugar del hallazgo fue un sector donde los empleados de la distribuidora estacionan sus automóviles. Por el momento se desconocían las causas de muerte, pero trascendió que el cuerpo presentaba signos de violencia.
En el lugar trabajó personal de la Policía de Investigaciones en tanto llegaba el fiscal de turno Adrián Spelta. Un momento de tensión se produjo después del mediodía, cuando se presentaron en el lugar tres mujeres manifestando que un familiar se encontraba desaparecido hace tres días y temían que la persona hallada sin vida en la distribuidora sea justamente esa mujer. La situación de nerviosismo se produjo porque la policía no les permitió ingresar al lugar ni aportar ningún dato o descripción de la personal fallecida.
El fiscal Adrián Spelta, quien quedó a cargo de la investigación llegó al lugar y tras recabar información con los policías encargados de las primera medidas, dialogó con algunos familiares, quienes pudieron identificar al muchacho.
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Personal de la PDI en el predio donde encontraron esta mañana un cadáver.
Foto: Virginia Benedetto / La Capital
Posteriormente, en diálogo con la prensa, el funcionario del MPA dio algunos detalles, aunque sin dar a conocer la identidad del muchacho fallecido: "Según nos explicó la mamá del joven, había salido el domingo aparentemente a hacer algunos mandados y no tuvieron más informaciones desde entonces. Vivía a unos 200 metros de este lugar".
Consultado sobre si el cuerpo del muchacho presentaba signos de violencia, Spelta lo negó: "Tenía algunos rastros de sangre en el rostro pero no hay ninguna evidencia, ni golpes, laceraciones o heridas de arma de fuego" que indicara que pudiera haber sido asesinado. Mas tarde y con la autopsia se determinó que no era sangre sino fluidos corporales debidos al estado de descompsición del cuerpo
El fiscal destacó que incluso entre las ropas del joven se halló "el DNI y algo de dinero". También destacó que de acuerdo al relato de sus familiares, la víctima tenía "un trabajo temporario y que no estaba vinculado a ninguna organización delictiva".
Al finalizar la tarde se realizó autopsia al cuerpo y se lo identificó como Franco Ruben S. de 31 años. La data del fallecimiento es de aproximadamente 3 días, y según los médicos no presenta golpes o heridas de ningún tipo. Tampoco se hallaron rastros de ahorcamiento. Todos los indicios dan cuenta de un fallecimiento por causas naturales El líquido hallado en cuerpo del fallecido no era sangre sino líquidos propios del cuerpo expuesto por el paso de las horas.