Un hombre de 29 años vinculado a la violenta interna que se disputa dentro de la barra brava de Colón de Santa Fe fue apresado el martes en el barrio Fonavi San Jerónimo de la capital provincial acusado de disparar y apuñalar a Alejandro R., de 48 años, la noche del 28 de mayo, un hecho en el cual también dos mujeres resultaron heridas de gravedad.
La detención de Pablo P. estuvo a cargo de agentes del Cuerpo Guardia de Infantería (CGI) de la policía de la ciudad de Santa Fe que patrullaban las calles del Fonavi Centenario que se erige detrás del estadio sabalero y observaron la presencia del sospechoso en la plaza de la manzana número 11 de ese barrio.
Pablo P. era buscado por la policía en el marco de la investigación de lo ocurrido la noche del 28 de mayo mientras Colón disputaba el partido por octavos de final de la Copa Sudamericana con River de Montevideo. En esas circunstancias se cruzaron en el barrio Centenario integrantes de las dos facciones de la barra y se desató un enfrentamiento con armas blancas y de fuego en medio de una disputa por el liderazgo.
Mariana G., de 47 años recibió varias puñaladas en el abdomen y aún sigue internada en grave estado; mientras que Camila Soledad R., de 23 años, sufrió lesiones y al poco tiempo fue dada de alta. Ambas mujeres son familiares de Chuky Ríos, quien le disputa el paraavalanchas a Manuel Nano Leiva, el por ahora jefe de la barra y allegado a Alejandro R., de 48 años, quien esa noche recibió tres disparos y varias heridas cortantes por lo que permanece internado pero fuera de peligro.
Ya el 19 de mayo Manuel “Nano” Leiva había sido atacado y recibió al menos seis disparos de un arma de fuego ejecutados desde una moto cuando estaba cerca de su vivienda de Tarragona al 600, en el barrio Centenario, y permanece internado debido a un cuadro infeccioso.
El hermano preso
Junto a “Nano”, la barra colonista es liderada por su hermano Juan Abel “Quique” Leiva, quien está preso en la cárcel de Coronda cumpliendo condena por el homicidio de Walter González Montaner, un instructor de artes marciales que intervino para parar una violenta pelea en el pub Fiji la mañana del domingo 13 de octubre de 2013, en la Recoleta santafesina, y recibió un certero balazo en el pecho.
“Quique” Leiva estuvo prófugo de la Justicia durante siete meses y fue detenido en el conurbano bonaerense. Tras ello, en un juicio oral lo condenaron a 30 años de prisión y en enero de 2017 quedó en medio de un escándalo cuando se viralizaron fotos de una pileta de lona que tenía en uno de los pabellones de Coronda.
Asimismo, en marzo de 2015 y después del triunfo de Unión contra Vélez por el torneo local, un hincha del equipo tatengue se enfrentó a balazos con los Leiva cerca de la cancha de Colón. Se llamaba Fabricio Echagüe y murió en el enfrentamiento. “Nano” y su otro hermano, Marcos Leiva, también fueron heridos en el intercambio y condenados a dos años de prisión en un juicio abreviado.
Más allá de eso, las internas, peleas y tensiones por el manejo de la barra son frecuentes ya que un tal “Chuky” Ríos quiere ocupar el lugar dejado por la ausencia de los Leiva. En febrero de este año, por ejemplo, atacaron el auto de “Nano” con una bomba molotov. Y a fines de mayo ocurrió el ataque a tiros contra su persona, aunque salvó la vida de milagro. Ahora parece que llegó la respuesta a los agresores, uno de los cuales sería el apresado ayer y quedó a cargo del fiscal de la Unidad de Homicidios Andrés Marchi, que lo imputará por el delito de tentativa de homicidio.