Otro de los episodios que impuso la necesidad de conocer los pormenores de la venta de Lo Celso al fútbol francés fue una visita informal a Rosario de uno de los reclutadores del PSG, mucho tiempo después de haberse cerrado la transacción. Luego de contactarse con un familiar de un futbolista rosarino que supo jugar en Francia, el reclutador pautó una reunión en la sede centralista con algunos directivos, la que generó cierta expectativa en el club canalla porque se supuso de antemano que la misma podía responder a un interés del club europeo por otro jugador de Central. Pero no. Grande fue la sorpresa cuando el hombre en cuestión sólo viajó para conocer si el agente Andrés Miranda había cobrado una comisión por la venta de Lo Celso, desconociéndose el origen de esa inquietud. Esta noticia corrió como reguero de pólvora en el círculo rojo deportivo de la ciudad, pero más allá de las conjeturas que se puedan hacer, los motivos formarán parte de cuestiones comerciales que hacen a la parte privada de los actores.