Newell's finaliza una temporada estresante y se puede ir Caruso

Día de despedida. ¿O de despedidas? Newell’s Old Boys le pondrá el moño a su participación en la temporada 2007/08 con la satisfacción de haber cumplido el objetivo único: salvarse del descenso. Y en un partido que sin dudas será más distendido a los habituales, ante un rival como San Martín de San Juan que bajó de categoría, el termómetro pasará quizás más por lo que pase en la tribuna respecto al técnico Ricardo Caruso Lombardi. ¿Será o no un indicador de lo que puede ocurrir con su futuro? Difícil que tenga tanta influencia, en un contexto donde su continuidad está más en duda que nunca y en otras manos su decisión, por lo que el de esta tarde puede ser su último partido al frente del equipo rojinegro.

Las dos semanas que pasaron desde el último partido aplacaron un espíritu que sin dudas debe ser festivo. Está bien, salvarse del descenso no debería considerarse un logro superlativo, pero sí si se tiene en cuenta que Newell’s estuvo realmente al borde del abismo cuando Caruso tomó las riendas, allá por la 11ª fecha del torneo Apertura. Al menos, la sensación es de profundo desahogo, sobre todo para los jugadores, que debieron convivir con una presión difícil de sobrellevar y lo hicieron bien.

Es entendible pensar que el camino estuvo plagado de espinas por esas circunstancias, pero no tanto al agregarse los problemas internos de varios jugadores con el entrenador. Este parece ser el principal motivo de que se dude tanto de su continuidad, al punto que hoy se transmite una sensación de que está más afuera que adentro de Newell’s. Si no, ¿por qué no se lo ratifica sin más?

Es que, por más que Caruso diga lo contrario, futbolistas de peso del plantel que lo cuestionaron duramente, seguirían en la institución y así es muy difícil pensar en mantener una sana convivencia.

A tal punto es importante esta cuestión, que la semana pasada el presidente Eduardo López licenció a 14 jugadores para evitar mayores roces internos y por eso Caruso preparó la despedida con un grupo reducido, en el que se encuentra como mayor novedad el regreso de Rolando Schiavi tras superar una molestia y la participación de Leandro Torres de titular por primera vez.

Sea o no su despedida, Caruso puede hacerlo con todos los honores si su equipo gana, ya que quedaría como el técnico que mayor porcentualidad de puntos sacó durante el mandato de López, inclusive por delante del campeón Américo Gallego (ver aparte).

Eso será a título personal. El hincha que irá hoy al Coloso del Parque seguramente sabrá ser agradecido por su gestión y le brindará además el mismo cálido trato al plantel. Juntos evitaron un mal mayor en una institución no acostumbrada a estas lides.