Gerardo Martino no quiere caer en situaciones de extrema confianza. No lo considera conducente. El entrenador del seleccionado argentino prefiere mantener el grado de exigencia hacia sus dirigidos y también ubica a sus rivales como obstáculos complicados de superar. Esa es la postura que transmite de cara al choque de semifinales de la Copa América Centenario. "Estados Unidos es el rival más duro, después de Chile", aseguró el Tata.
"La posibilidad y la ilusión que tenemos es de jugar una nueva final", confió Martino en una rueda de prensa desarrollada ayer en el NRG Stadium de Houston, escenario del choque esta noche.
Para Lionel Messi y los suyos se trata de alcanzar la tercera final consecutiva en tres años, luego de las frustraciones del Mundial de Brasil 2014 y la Copa América de Chile 2015.
Mientras Alejandro Sabella dirigió en Brasil, Martino estuvo en el banco en Chile.
A raíz de los resultados obtenidos hasta el momento y el hecho de ser local, Martino colocó a Estados Unidos "por debajo de Chile y por encima de los otros tres rivales" que Argentina enfrentó hasta el momento: Panamá, Bolivia y Venezuela.
"Me preocupa más el Estados Unidos del primer tiempo con Ecuador. Y espero poder jugar un partido más parecido al segundo tiempo de Estados Unidos con Ecuador", agregó, en referencia a los cuartos de final que los locales dominaron el inicio y sufrieron mucho en el complemento.
Martino reconoció la tarea del entrenador alemán Jürgen Klinsmann al frente del seleccionado anfitrión y señaló que su fútbol "creció y mucho", sobre todo en los últimos años.
Además consideró "lógico" que el local busque "neutralizar al mejor futbolista del mundo" y recordó que Messi ya ha enfrentado "marca personal" y también otras selecciones "decidieron rodearlo más".
Falencias en la presión y en la elaboración
Martinó admitió que Argentina tiene falencias. "La verdad es que no somos los mejores ni en la presión alta ni en la elaboración de juego y por eso a veces tenemos que cambiar planteos. Hay que tener estos aspectos en cuenta cuando jugamos contra los mejores", advirtió el entrenador albiceleste.