¿Podés trazar un balance de lo que fue la primera parte del torneo?
¿Podés trazar un balance de lo que fue la primera parte del torneo?
Sí. Si lo analizo del lado del resultado obvio que es malo, pero si lo veo desde la propuesta que estamos buscando respecto a la edad de la reserva, para mí es muy positivo. Hoy en reserva hay jugadores titulares que tienen 16, 17 años, cuando en la anterior había muchos chicos de arriba de 20 años. Lo que buscamos con eso es un trabajo en proyección. El caso Villagra es uno de los más relevantes. Yo lo subí con edad de sexta y hoy ya con 18 años tiene partidos en primera. Eso es lo que me pone contento. Obvio que quiero ganar y que me duele cuando quedo expuesto porque muchos sólo se fijan en el resultado, pero hoy estamos priorizando otras cosas. Cuando dirija una primera división le tendré que apuntar más a los resultados, que son los que te permiten mantenerte. Hoy mi función es otra.
¿En qué sentiste que quedaste expuesto?
Y... lo primero que se dice en cada derrota es que el Kily no puede dirigir ninguna primera división. Esto es porque siempre se analiza el resultado puro y duro, pero insisto, yo estoy en una etapa de formación. Busco los mejores jugadores para intentar ganar, pero esos chicos cometen errores propios de la edad. Lo que tengo que hacerles entender son ciertas acciones del juego, pero sobre todo lo que representa la camiseta de Central para que cuando lleguen a primera puedan marcar una diferencia.
¿Sentís que los hinchas son conscientes del proceso de formación del que hablás?
No, porque perdemos un partido y al otro día en el diario dice “perdió la reserva del Kily”. Hay que ver un montón de situaciones y muchas de ellas a la gente no le interesan. Lo que mira la mayoría es el resultado final.
¿Y te molesta que la vara sea sólo el resultado?
Está planteado así pero no sólo en Central. Por supuesto que me molesta pero no puedo ir en contra del pensamiento de todos. Internamente estoy tranquilo porque sé que estoy trabajando en un proceso de cambio rotundo para los chicos. No es lo mismo jugar en cuarta, quinta o sexta que hacerlo en la reserva.
¿Sentís que hay respaldo detrás de este proceso?
Creo que sí porque si no me lo dirían. Hoy mi futuro es incierto, más allá de que tengo contrato hasta junio, porque en este club puede pasar cualquier cosa. Después del último partido a los chicos se los dije y mi incertidumbre está. No sé si voy a seguir, si tengo ganas de seguir así.
¿Tenés ganas de seguir?
No lo sé. Acabamos de terminar un ciclo y tengo que analizar varias cosas. Tengo que ver si tengo ganas de tolerar que se diga esto, lo otro. Debo analizar si me veo con posibilidades en otro equipo, tomando decisiones propias, cosa que hoy no hago porque hoy dependo de algunos jugadores que bajen de la primera. Esto hace que el equipo varíe de acuerdo a lo que venía entrenando. Nosotros trabajamos para la primera, por eso hay días que te piden chicos para que vayan de sparring y está perfecto, pero todo pasa por las expectativas que tengo de cara a ser entrenador de primera en el día de mañana. Siempre digo que entreno pibes que no dirijo y dirijo pibes que no entreno. En su momento me llegaron a bajar hasta diez jugadores, ahora como con el Patón, pero sé que la reserva es una división especial, donde si querés estar tenés que aceptar las condiciones que hay y si no mirar para otro lado y apuntar a buscar una posibilidad en otro lado.
¿Te jodería decir “hasta acá llegué, no soy más el técnico de la reserva”?
Me dolería mucho por los chicos porque siento que están muy comprometidos con este grupo de trabajo. Cuando fueron a mi casa después de Racing para decirme que no me vaya me convencí de que me tenía que desvivir por ellos.
¿Pero sentís que no depende de vos?
Acá lo que puede pasar es que vengan los dirigentes y me digan “no vas a ser más el técnico de la reserva por equis motivos”. Son decisiones, como dice el gran Miguel (Russo). Si eso pasa tendré que agachar la cabeza y ver qué es lo que pasa.
¿Pero es una decisión de apoyo que tienen que tomar los dirigentes o es una decisión que vos tenés que tomar?
Mía no es porque yo tengo contrato. Me pasó algo similar en el semestre anterior, cuando muchos dijeron “confirmado el Kily González” cuando yo tenía contrato. Acá es cuestión de confirmar grilla de inferiores, técnico de la reserva y vamos todos para adelante.
¿Hay posibilidades de reacomodar esta situación y que entre primera y reserva se trabaje de otra manera?
Sí, sería ideal que nos juntemos a hablar con el técnico de la primera y veamos qué es lo que pretende de la reserva.
Pero desde afuera uno piensa que charlan diariamente con el técnico de primera.
No, los que hablan diariamente son Marcelo Goux con el Chueco García, mi ayudante. Yo hablé sólo tres veces con Cocca y bien, pero hasta ahí. Igual, mientras exista ese contacto está bien.
Pero suena raro que no hay relación ni diálogo entre el técnico de primera y el de reserva.
Pero son decisiones. Quizá Cocca considera que el que tiene que hablar es Goux y está todo bien. Por ahí con Goux hablo, pero no con Cocca.
¿Estás buscando que puedan relacionarse de otra manera?
A mí lo único que me interesa es que haya una comunicación clara para con los pibes. Después, a cada uno le puede gustar una cosa o la otra. Yo me manejaría de otra manera, pero acá yo me tengo que adaptar a la primera y no la primera a mí. En todos lados la primera es la que decide y las demás divisiones se adaptan. En este caso Cocca decidió que sea Goux el que hable con el Chueco García y está perfecto.
Pero dijiste que vos actuarías de otra manera.
Hoy te digo que sí, pero el día de mañana por ahí estoy en la primera y sería igual que él, no lo sé. No digo que esté bien o mal lo que hace, pero son las decisiones que tomó. No puedo exigirle nada a la gente de la primera. Mirá, en las pocas veces que hablamos lo único que le pedí fue respeto y comunicación, porque soy del club, nací acá y no me gusta que se diga que voy a meter palos en la rueda. Yo no le serrucho el piso a nadie, porque puedo tener fama de todo, pero menos de serrucho. Si tengo algo para decir se lo digo en la cara a quien sea. No necesito hablar mal de nadie por detrás. Eso siempre me dio cosas buenas y otras no tanto, porque llegué a quedarme fuera de un Mundial por ser como soy, pero no me arrepiento. Siempre me gustaron las cosas claras, por eso algunos me quieren y otros no. La relación que ellos quieren es esta y hay que saber adaptarse.
¿Los dirigentes no debieran intervenir en esa situación, para recomponerla de alguna manera o mejorarla?
Tal vez tienen pensado hacerlo para la etapa que se viene. Seguramente buscarán otra manera o corregir cosas que se hicieron mal, pero acá lo que hay que hacer es pensar en el patrimonio del club, que son los pibes. Dejemos de lado a Cocca y el Kily González porque Central esta por encima de todos nosotros.
¿Es cierto que los jugadores de reserva no pueden trabajar en el gimnasio porque no los dejan utilizar el de Arroyo Seco?
El gimnasio de Arroyo lo maneja la primera. Nosotros nos adaptamos con nuestro profe y buscamos nuestras propias herramientas para que el chico pueda hacer fuerza, porque considero que es un condimento que no puede faltar. Son cosas que la gente de primera plantea y está bien porque son ellos los que deciden. Yo me adapto a lo que tengo y trato de solucionar las cosas de la mejor manera, sin molestar a nadie.
¿Si cambian el turno de entrenamiento y lo hacen a la tarde tampoco lo podrían usar?
Lo que pasa que entrenamos a la mañana porque así entrena la primera. En su momento el club quiso hacer un gimnasio aparte para la reserva y no se pudo por cuestiones económicas, pero la realidad es que la reserva no hace trabajos de fuerza si nosotros no buscamos las variantes, como son agarrar las pesas en el campo, que también está bueno para que los chicos sepan que es diferente la reserva de la primera, que en la primera tenés gimnasio y en la reserva lo tenemos que montar nosotros. Pero no hay problemas, nos adaptamos.
Cocca dijo en una entrevista con este diario que los partidos de reserva sean los viernes es una complicación.
Es una complicación porque tenemos que priorizar el trabajo de la primera. Muchas veces yo tengo que trabajar con el equipo pero el técnico de primera no baja los jugadores porque los necesita para hacer su trabajo. Entonces después no sabés si poner a los de primera porque necesitan fútbol o si poner a pibitos de 16 años.
¿Hay imposiciones de parte del cuerpo técnico de primera respecto a que los jugadores que bajan a reserva tiene que jugar sí o sí?
Mirá, para mí hay un tema importantísimo que es la “comodidad”. Cuando está cómodo en un lugar dejás de valorar el esfuerzo que tenés que hacer para llegar ahí. Si el jugador de primera no viene comprometido para que el partido de reserva le sirva para recuperar su nivel o viene a caminar la cancha, yo lo saco a los 5 minutos o directamente no lo pongo. Hoy tomo decisiones de acuerdo a lo que veo.
¿Te pasó algo de eso?
Sí, por supuesto. Eso sí, si no te pongo te doy la explicación de por qué no jugás, más a los chicos que bajan de primera. Porque la primera no es llegar para completar un plantel, el objetivo es ganarte un lugar en el equipo. Yo quiero que el chico la rompa en primera y pueda irse a Europa como lo hice yo en su momento.
¿Como hincha, te molesta ver que hay chicos que se relajan cuando tienen que bajar a reserva?
Claro que me jode, ¿cómo no me va a joder? Pero cuando eso pasa se los digo. En eso es donde me parece que debe haber más comunicación todavía, para que el pibe no lo sufra.
¿Te ves en enero arrancando la pretemporada?
No lo sé.
¿Pero hay algunas cosas que se tendrían que dar o pasa por una sensación tuya?
Es una sensación mía. Hablé ya con los chicos y les dije. Nosotros volvemos el 3 de enero, como la primera, tenemos ya la pretemporada programada y la lista de jugadores, pero nunca se sabe.
¿Te ponés algún plazo para definirlo o para que definan los dirigentes?
No, esto es ya. A ver, yo debería estar tranquilo porque tengo contrato hasta junio, pero es una sensación que tengo. Sólo eso. Sí hablé con directivos y ellos mismos reconocen que hay que cambiar cosas que sucedieron en estos últimos seis meses y que no pueden volver a pasar.
¿Por ejemplo?
Son cosas que tienen que ver con lo cotidiano, no hay nada raro. No es que me peleé con Cocca ni nada por el estilo. Con Cocca hablé tres veces y nada más. No hay mala onda ni nada, pero sí tendríamos que mejorar algunas cuestiones. Por ejemplo, ver qué jugadores baja, quiénes merecen bajar, a quiénes tenemos que potenciar para subir. Desde ese lado va la cosa. Yo me puedo fastidiar con ese tipo de cosas pero el que la pasa mal es el pibe.
Por Nicolás Maggi