Héctor Rio / La Capital
Solucionado. Kevin Ortiz se perdió el clásico por un problema en la renovación del contrato, pero ya puso la firma.
Después de la pequeña tormenta en el caso Kevin Ortiz llegó la buena noticia en Central . El volante central finalmente acordó su situación contractual con el club y ya podrá ser tenido en cuenta por Miguel Ángel Russo luego de que fuera dado de baja en la lista de convocados previo al clásico.
En tanto, Damián Martínez "padece un síndrome febril en estudio, por lo cual fue desafectado del partido ante Huracán (será el jueves)", informó el departamento médico de Rosario Central.
Lo que ocurrió con Ortiz fue sin dudas un contratiempo importante antes de un partido de semejante magnitud, pero fue la decisión que tomó la comisión directiva, a la que Russo acató sin poner objeciones.
Pese a la no convocatoria del volante central, las charlas entre las partes continuaron y tras un par de días más de negociación hubo acuerdo. Así, Ortiz firmó contrato hasta 2026 (lo hizo en la tarde de este martes en la sede de calle Mitre), pero lo sustancial en esta historia es que estará nuevamente a consideración del entrenador pensando en el partido ante Huracán.
No obstante, Ortiz siempre continuó entrenándose sin problemas a la par del resto, aunque sabiendo que mientras no acordara los términos del nuevo contrato no iba a poder jugar.
Nunca hubo voces oficiales, pero lo que trascendió es que las diferencias estaban centradas en lo que tiene que ver con la cláusula de rescisión del nuevo vínculo. Pero lo dicho, lo que llamó la atención fue que desde el club se tomara semejante decisión en la previa nada menos que de un clásico y no se esperara un día más.
Ortiz siempre estuvo muy bien considerado por parte de Russo, a tal punto que no sólo fue casi siempre titular, sino que en el inicio de este ciclo el técnico le dio la cinta de capitán.
La actual dirigencia canalla tiene una política establecida en relación a las renovaciones de los contratos y es que aquellos que no lo hagan no serán tenidos en cuenta por el entrenador, pero, se insiste, fue llamativo el momento en que se tomó esa determinación.
Ahora la cosa es distinta y los nubarrones que se habían presentado por la diferencia de las partes en medio de la negociación desaparecieron. El volante central y el club acordaron los términos del nuevo vínculo y de esta forma el futbolista ya está en condiciones de volver al ruedo.
Damián Martínez "padece un síndrome febril en estudio, por lo cual fue desafectado del partido ante Huracán", informó el departamento médico de Rosario Central.
La curiosa anécdota sucedió a mediados de la década de 1960, cuando el entonces Jorge Bergoglio dictaba clases de Literatura en la capital santafesina
Por Luis Emilio Blanco
Por Leandro Garbossa