No son muchas las cosas positivas que pueden destacarse de este Central de Leandro Somoza en los primeros ocho partidos al frente del equipo. Sí hay un dato desde lo estadístico que merece ser destacado: de los tres partidos que el canalla jugó en el Gigante con el nuevo entrenador no perdió ninguno. Es más, obtuvo siete puntos de nueve en disputa, lo que habla de una cosecha más que interesante, que contrasta ampliamente con lo hecho en condición de visitante. Al menos ese detalle es un buen augurio de cara al inicio del torneo que para el canalla comenzará el próximo lunes, justamente en Arroyito, frente a Lanús.
A la luz de los resultados y con los números en la mano, la fortaleza que logró establecer el equipo de Somoza en condición de local es un elemento al cual aferrarse porque, se sabe, el hecho de hacer pesar la localía suele tener un plus. Y lo que dictaminó el fixture es que Central iniciará su faena en esta Liga Profesional en Arroyito.
Son apenas tres partidos los que hay para pararse en esa estadística. Pueden ser pocos o muchos, pero es lo que le tocó al Central de Somoza. Los tres partidos que Central jugó en Arroyito bajo el mando del sucesor del Kily González fueron contra Colón (2-2), Independiente (3-0) y Estudiantes (3-1). Es cierto que el equipo tuvo sus inconvenientes en cada uno de ellos, pero a casi todos los sacó adelante.
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Central igualó contra Colón en el primer partido de Somoza en el Gigante.
Leonardo Vincenti / La Capital
Hay algunos detalles, desde lo futbolístico, que ameritan también un llamado de atención. Por ejemplo, Colón vino al Gigante con un equipo alternativo y en el momento en el que Julio Falcioni empezó a mandar a la cancha a los habituales titulares Central empezó a sufrir el partido. Después, en el final de la Copa de la Liga, Estudiantes lo hizo con prácticamente todos chicos de reserva y hasta algunos de cuarta. Distinto fue lo que sucedió frente a Independiente, que puso todos sus titulares, pero pese al triunfo Central la pasó bastante mal, sobre todo en el primer tiempo.
“Pese a los malos resultados que tuvimos, cada vez que jugamos de local la cancha estaba explotada y eso al jugador le gusta, lo contagia y creo que en cierta forma el equipo contagió de adentro hacia afuera. Pero eso lo tenemos que hacer todos los partidos, no sólo de local, sino que tenemos que empezar a mejorar las producciones también de visitante”, destacó Somoza en conferencia en la previa del debut del equipo, en alusión a lo que fue el desempeño de su equipo jugando en Arroyito.
Cualquier mención que se haga sobre este punto en particular tiene un anclaje lógico debido a la presión que, se supone, habrá desde el inicio mismo del campeonato. Es que todo lo malo que se hizo en el semestre anterior repercutirá inmediatamente en este que está por comenzar y sin dudas uno de los que se jugará una patriada importante en el arranque es el propio Somoza. No es momento de hablar de cosas que “podrían ocurrir” en caso que los resultados no aparezcan de inmediato, tampoco de buscar problemas donde, por ahora, no los hay, pero desconocer el contexto tampoco resultaría lo más aconsejable.
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Los futbolistas de Central celebran el tanto de Velázquez contra Independiente.
Leonardo Vincenti / La Capital
Lo que está claro bajo la conducción de Somoza es que hubo una diferencia abismal entre lo que el equipo cosechó de local y cómo le fue de visitante (afuera de Arroyito perdió todo lo que jugó: ante Tigre 0-2, Aldosivi 0-1, Lanús 1-3 y Huracán 1-2). En su reducto, amén de no haber tenido problemas en el juego, al menos supo resolverlo en el resultado, con la presión lógica que existe en cada partido y que en estos últimos meses estuvo presente más que nunca.
A un día del inicio del torneo, Central tiene un sinfín de cosas para mejorar porque lo mostrado hasta aquí dejó bastante que desear, pero al menos logró sentar las bases de un equipo al que todavía jugando mal no le pesó la localía. Y que el arranque sea justamente en Arroyito resulta al menos un guiño, al que habrá que otorgarle por supuesto sustento desde lo futbolístico. Pero si lo poco que sumó el Central de Somoza lo hizo como local qué mejor que el arranque sea en el Gigante.
Con una buena cantidad de goles
En condición de local, el Central de Leandro Somoza logró convertir 8 goles en los primeros tres partidos que este entrenador dirigió en el Gigante de Arroyito: 2 a Colón, 3 a Independiente y 3 a Estudiantes. La última vez que un DT logró que su equipo convierta al menos esa cantidad de goles en los primeros tres partidos que actuó como local fue hace 38 años, en el Nacional 1983. El entrenador auriazul fue Vicente Cayetano Rodríguez que logró que los canallas hicieran 13 goles en sus primeros tres juegos en Génova y Cordiviola. Ya que tras caer 1 a 0 con San Lorenzo, luego goleó 6 a 1 a Juventud Antoniana y 7 a 1 a Atlético Santa Rosa.
Somoza todavía no lo muestra
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Somoza pondría en cancha el mismo equipo que igualó con Sol de Mayo por Copa Argentina.
Sebastián Suárez Meccia / La Capital
Que Leandro Somoza no haya hecho demasiado hincapié en el equipo en estos últimos entrenamientos es otro fuerte indicador que los once para el debut de mañana ante Lanús serían los mismos que actuaron contra Sol de Mayo en el cierre del pasado semestre, por la Copa Argentina. Este sábado el DT ordenó algunos trabajos específicos, por líneas, aunque está claro que a un día del partido ya tiene el equipo en mente. El viernes Somoza dejó abierta la puerta para “una o dos variantes”, pero no es mucho el material con el que cuenta.
De no darse ninguna sorpresa, Central arrancaría el torneo con: Gaspar Servio; Damián Martínez, Facundo Almada, Juan Cruz Komar, Lautaro Blanco; Walter Montoya, Claudio Yacob, Marcelo Benítez; Luciano Ferreyra; Lucas Gamba y Alejo Veliz.
En lo que tiene que ver con los refuerzos, las mayores expectativas siguen estando por el lado de Gastón Avila. Con el Gato está prácticamente todo acordado, pero hay situaciones puntuales que el defensor debe resolver con Boca antes sellar su salida, que sería a préstamo, como sucedió en 2021.