Domus, Casaterra y Cristalux: se dice fácil pero se construye en 68 años. Hablamos de tres grandes marcas del segmento de proveedores de la construcción de Rosario en manos del Grupo Mauro. Empresas cuyo primer gen nació de la mano de Eduardo Mauro, un inmigrante italiano que aprendió de su suegro el oficio artesanal de trabajar el vidrio y en el año 55 fundó su primera empresa de este sector junto a algunos socios. Ese fue el inicio de este Grupo al que luego llegaría primero su hijo, Rubén Ángel, y luego sus descendientes para ampliar el negocio, profesionalizarlo, diversificarse, definir cada marca y abrir nuevas unidades. Suplemento Negocios entrevistó a Fabio Mauro, nieto de Eduardo, para conocer cómo es hoy el mercado, demanda, valores, proyecciones de las tres empresas de este grupo.
Para entender las unidades que manejan hoy los Mauro hay que saber que Domus y Casaterra comercializan pisos, revestimientos, griferías y sanitarios, el primero para un segmento premium y el segundo para uno medio, mientras que Cristalux es una industria modelo que procesa vidrio para la arquitectura y la construcción. Son cuatro los hermanos a cargo de las empresas, Fabio y María Daniela se ocupan mayormente de Domus y Casaterra mientras que Leandro y Fabricio están en la industria del vidrio. Y la cuarta generación ya está asomando en la empresa, porque el hijo de Fabio, Stéfano, eligió seguir los pasos de sus tíos y es también parte del equipo de Cristalux.
“Esta es una empresa bien familiar, la vida de mi abuelo era el vidrio, y luego llegó mi papá que sumó en los años 70 los revestimientos, cerámica y todo lo demás. Yo lo veo a mi papá con un espíritu emprendedor, con una fuerza que tal vez venía en la sangre, ese espíritu de inmigrante, ese empuje, esa tenacidad. Yo aprendí de ellos eso, la tenacidad, a no darnos por vencidos ni fracasar en el intento y seguir adelante”, relata Fabio Mauro. Vaya si lo han hecho, porque las tres empresas constituídas lograron a través de la diversificación atender a todos los segmentos.
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El porcelanato, uno de los productos de mayor demanda en Domus.
En el caso de Domus, la marca está instalada en toda la esquina de Pellegrini e Italia, atendiendo a un segmento ABC 1 con marcas líderes tanto nacionales como importadas. Este mercado se sostiene bien y ha tenido un crecimiento exponencial en épocas de pandemia. Fabio dice que nunca en su vida vió una cosa igual: “en el 2020 y 2021 la fila para ingresar a comprar a Domus daba vuelta la esquina”. La ecuación fue así: quienes tenían poder adquisitivo no podían viajar, ni comprar autos porque no entraban al país, no podían salir porque estaba todo cerrado. Qué mejor que invertir en el entorno más cercano, su propio inmueble. “En ese momento se triplicaron las ventas, lo que antes vendíamos en un mes lo vendíamos en una semana”, calcula.
Otro momento donde registran esos picos es cuando hay una corrida del dólar, como por ejemplo ocurrió esta semana que pasó. Pero si la corrida se sostiene, quienes están en la construcción buscan freezar precios y stockearse. Para este 2023 la proyección del empresario es que será un año donde no habrá crecimiento en ventas pero sí se sostendrá el mercado. “Yo soy positivo, pero este año no tengo tanta expectativa, es un año electoral, hay siempre algo de especulación y muchas veces la gente dice vamos a esperar un poco para invertir y congela los proyectos”, piensa.
Atender a todos los mercados
Mientras que Domus funcionaba firme, curiosamente el local está ubicado en el mismo lugar donde en los años 50 el abuelo trabajaba el vidrio, la familia Mauro se dio cuenta que necesitaban atender al resto de los segmentos que no venían a Domus. Así, hace más de diez años nace Casaterra, una marca que hoy tiene dos locales, uno en Fisherton sobre Eva Perón al 7600 y otro en zona sur, en Oroño al 4200, ambos lugares pensados estratégicamente para estar cerca de sus potenciales clientes.
En lo que respecta a la rentabilidad, Fabio explica que es una unidad más elástica y sostenida. Lo que sí sucede es que es un negocio que tiene temporadas, desde diciembre a febrero e incluso a veces marzo, las ventas siempre bajan. Pero agrega que el segmento donde ellos están siempre es “un poco burbuja, porque la construcción siempre está en movimiento en esta zona del país, yo les digo a quienes trabajan conmigo que tenemos suerte de estar en este sector”.
Para comprender cómo es la comercialización en estos locales, lo cierto es que el 70% de lo que venden es piso y revestimientos, de los cuales el 50% se fabrica en Argentina y el resto afuera del país. Importan mayormente de industrias de Brasil, que son muy potentes en el porcelanato, y también traen para el segmento premium productos de España e incluso Italia, la cuna de este producto. “El tema es que en este negocio todos los clientes quieren inmediatez, entonces muchas veces no esperan los productos importados y se llevan lo que tenemos en cada momento”, explica. El resto de los productos que venden, el 10% representa a grifería, que llega de Alemania y España, otro 10% sanitarios y lo demás son productos varios del sector.
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Cerámicos y revestimientos que vienen con distintos diseños y tramas.
Una industria modelo
Pero un párrafo aparte es lo que implica para la provincia de Santa Fe la fábrica para procesar vidrios que tiene el Grupo Mauro. Cristalux se mudó hace un año a una nueva planta donde invirtió u$s5 M sobre Batlle y Ordóñez al 3600, Fabio recuerda que hasta el gobernador estuvo presente en ese momento. Allí son positivos mirando al futuro, porque ya están pensando en importar nueva maquinaria para ampliar su capacidad productiva, tienen más de 5.000 metros cubiertos y más de 22 mil tiene el terreno, por lo cual las posibilidades de expansión son muy buenas. “En Argentina hay posibilidades de crecer con esta industria”, promete.
“El 14 de febrero hizo un año de la inauguración de la planta. Esta es una unidad de negocios totalmente diferente, no es de retail, es una industria. Nosotros le proveemos a las fábricas de aberturas en las grandes obras, el proceso que hacemos tiene mucho valor agregado”, explica Fabio. Se refiere a la fabricación de vidrios templados, doble vidriado hermético, vidrios de seguridad o piezas especiales con multilaminados que son claves para la construcción.
Cada gran decisión del Grupo Mauro, como la de invertir para crecer, se habla, se piensa, se proyecta en familia. Fabio concluye contando que, cada vez que es necesario, se juntan los cuatro hermanos para analizar esos momentos importantes de crecimiento y asegura que disfrutan lo que hacen, porque crecieron inmersos en este mundo.