La provincia entregó seis móviles a la Unidad Regional IV de policía del departamento Caseros de los cuales tres serán afectados a tareas de patrullaje en la ciudad cabecera de Casilda y los restantes destinados a las comisarías de Villada, San José de la Esquina y Chañar Ladeado. El acto fue presido por el ministro de Seguridad del gobierno santafesino, Raúl Lamberto, quien además anunció la incorporación para el próximo mes de más personal y la puesta en marcha de obras para mejorar las condiciones edilicias y de habitabilidad de la alcaidía de la referida regional, para lo cual ya se comenzó con el traslado de presos. A ello se suma que está previsto para marzo el ingreso de una treintena de jóvenes que serán capacitados para tal fin en el marco del programa conocido como policía de proximidad.
El jefe de la UR IV, Walter Llanos, valoró el aporte de la provincia y aseguró que la cantidad de móviles que se suman a los ya existentes "es suficiente" para cubrir la demanda en la zona aunque admitió la necesidad de reforzar los recursos humanos, lo que comenzará a ser resuelto cuando se concrete la incorporación de agentes prometida por Lamberto.
Imponderables. Sobre los resultados obtenidos en lo que va del año en materia de política de seguridad, el ministro evaluó que "esta es un área compleja y difícil que tiene imponderables, pero existe una gran voluntad política de mejorar las cosas en el marco de un plan por el que hay que seguir trabajando para dar todos los días un pasito adelante".
En ese marco ponderó la importancia de avanzar en el trabajo mancomunado al sostener: "Creo que es posible transformar las cosas si continuamos trabajando en forma coordinada entre provincia, Nación, municipios y sumando a la Justicia y las instituciones intermedias". Asimismo bregó por la permanencia de Gendarmería fundamentalmente en Rosario aunque aclaró que, independientemente de ello, "estamos preparando en cantidad y calidad a las fuerzas policiales" para responder a los actuales necesidades.
Por su parte, el secretario de Seguridad, Gerardo Chaumont, destacó la decisión de haber acentuado "la presencia policial en las calles" y en ese sentido resaltó el ejemplo de la capital santafesino donde bajaron de 6 mil a 4.500 las llamadas de emergencia al haberse "duplicado" la cantidad de vigilantes y patrulleros en la vía pública.
Del acto también participaron el titular del Nodo Rosario, Gustavo Zignago, el senador por el departamento Caseros, Eduardo Rosconi, el intendente de Casilda, Juan Carlos Bacalini, el presidente comunal de Villada Ramiro Hernández, la jueza de menores local, Cristina Pecoraro, además de autoridades de la UR-IV y comisarios de las distintas localidades que forman parte de su jurisdicción territorial, entre otras autoridades.
Buenos policías. Consultado sobre el caso de corrupción en el que se ve involucrado el comisario de Chabás denunciado por haber pedido una coima y posteriormente imputado y pasado a disponibilidad, Lamberto dijo que la fuerza necesita de buenos policías y no de quienes cometen inconductas aunque aclaró que "tienen todo el derecho de defenderse" ante la Justicia.
Similar opinión manifestó Llanos al justificar su medida de separar a Norberto R. y al agente Gonzalo R., de sus funciones hasta tanto se esclarezca su situación judicial. "Sé que algunos hasta me trataron de no tener códigos por haber tomado esta decisión, pero hice lo que corresponde a un funcionario de bien que ama la institución policial e intenta defenderla con su accionar".
Según las estadísticas, Caseros es uno de los departamentos que registra menor índices delictivos aunque la seguridad, como en el resto de la provincia, es el principal tema de preocupación.