En los Tribunales de la Justicia santafesina se reciben y dan tratamiento a las distintas situaciones de violencia que se suscitan a lo largo y ancho del territorio provincial. Las causas judiciales se cuentan por miles. En Rosario y Santa Fe, principalmente, existen historias que son recibidas en los Tribunales cotidianamente y que encuentran una respuesta cercana. Estas situaciones pueden traducirse fácilmente como violencia familiar, violencia de género, las medidas atinentes al sistema de protección de niñas, niños y adolescentes, y otras tantas que culminan con internaciones por razones de salud mental o adicciones.
Todos los días ingresan a los Tribunales de la Provincia una gran cantidad de denuncias por violencia familiar, muchas de ellas formuladas tras gravísimas situaciones de agresiones físicas. Otras tantas surgen a partir de situaciones de violencia psicológica, simbólica, económica y, además, existen por supuesto aquellas que suelen presentarse combinadas. Aproximadamente se atienden más de 7000 denuncias de violencia familiar por año, solo en la ciudad de Rosario y más de 5500 en la ciudad de Santa Fe.
Desde hace unos años, el Poder Judicial de Santa Fe estructuró distintos dispositivos organizacionales para una atención rápida y eficiente de las distintas violencias. Para el fuero de familia, por ejemplo, existen las “Secretarías Especializadas en Violencia Familiar” que funcionan dentro de cada Tribunal (hoy juzgados unipersonales).
Dentro del Ministerio Público, también existen unidades de atención especializadas. Estas se denominan “Unidades de Información y Atención a la Víctima de Violencia Doméstica y de Género”. Funcionan tanto en Santa Fe como en Rosario, ciudades en donde se evidencia una mayor necesidad de atención de la problemática.
>>Leer más: A diez años del Ni Una Menos, la violencia machista sigue en aumento
Puerta de entrada a la Justicia
Son las propias víctimas o sus familiares los que se presentan a denunciar directamente en los Juzgados de Familia o bien ante las Fiscalías Extrapenales del Ministerio Público. También existe una gran cantidad de presentaciones hechas por titulares o representantes de ONG’s, escuelas, centros de salud, o bien directamente vecinos de las víctimas.
Otras situaciones ingresan y son derivadas desde la Comisaría de la Mujer y también desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) cuando se relacionan con la comisión de delitos, entre otros.
Sistema de urgencias
Hoy los actuales Juzgados Unipersonales de Familia brindan, en la enorme mayoría de los casos, una respuesta inmediata a las denuncias por violencia familiar. En general, la respuesta judicial, utilizando el marco jurídico adecuado, consiste en disponer restricciones de acercamiento, exclusiones del hogar, ceses de hostigamiento.
Tanto en Rosario como en Santa Fe, el Poder Judicial ofrece un servicio de urgencias que da respuestas en horas y días inhábiles. Para ello, existe un cronograma de “turno de urgencias” que opera a modo de “guardia pasiva”. Es decir, ante un determinado requerimiento, que se formula directamente en los tribunales o fiscalías extrapenales, se constituye el equipo conformado por los jueces, secretarios y otros funcionarios para un adecuado tratamiento de la situación problemática.
>>Leer más: Como desde hace diez años, Rosario otra vez salió a la calle para exigir "ni una menos"
Los distintos tipos de violencia
Es importante que la población en general pueda distinguir los distintos tipos de violencias existentes y que el ordenamiento jurídico pretende sean resueltos en sede judicial. Existe una diferencia entre violencia familiar y violencia de género. La violencia de género es todo tipo de violencia que se ejerce respecto de una mujer por su condición de tal (CEDAW – BELEM DO PARÁ).
En gran parte, los casos de violencia de género tienen su origen en situaciones de violencia familiar, pero no necesariamente. El elemento clave para constituir violencia familiar es que se dé en el marco de una relación familiar. Puede haber situaciones de violencia de género que se observen en otros ámbitos. En esos casos, el tratamiento que les brinda el Poder Judicial es similar al de la violencia familiar, pero tramitará ante jueces de los fueros respectivos.
>>Leer más: Collages callejeros para denunciar la violencia contra las mujeres
La necesidad de un abordaje interdisciplinario
Las causas de la violencia familiar y de género son múltiples y de una complejidad creciente. El tratamiento que pueda darse desde el Poder Judicial debe estar enfocado y propender a la desaparición y/o supresión de estas violencias, así como a su seguimiento y monitoreo.
Cabe reconocer que existe un denodado trabajo realizado por organizaciones no gubernamentales, el propio estado provincial, municipal y comunal, dirigido a empoderar a las mujeres, a las víctimas y concientizar a la comunidad en general.
La respuesta del Poder Judicial se relaciona muchas veces con la urgencia y con la necesidad de prevenir un daño mayor, pero el abordaje de fondo de la problemática radica en todo el aparato estatal.
La complejización y el crecimiento de distintas especialidades profesionales para el abordaje transversal de las violencias requiere el fortalecimiento de los “Equipos o Gabinetes Interdisciplinarios” de la Justicia de Santa Fe. Estos profesionales especializados permiten contener las situaciones recibidas y colaborar con la magistratura a la hora de adoptar las decisiones que requieren inmediatez, urgencia y una respuesta adaptada a la situación de violencia que viven las víctimas.