"Convocatoria reunión en defensa de los espacios verdes. Jueves 20 de enero. Ovidio Lagos y Presidente Perón (ex Godoy). 18 horas. Basta de sacar árboles". Así, sobre un fondo verde, se lee la invitación para mañana, del grupo de vecinos autoconvocados que hace quince años se presentan en las redes y en todo espacio de defensa del medioambiente como "Protegiendo nuestros árboles Rosario" y tienen unos dos mil seguidores en el mundo virtual.
El encuentro intenta ser un salvataje a la especie arbórea que se planifica extraer para que la provincia construya una pileta olímpica dentro del Complejo Educativo, Recreativo y de Alto Rendimiento Deportivo (Cerard), con miras a los Juegos Suramericanos de la Juventud que se disputarán en Rosario a partir de abril del 2022.
La Capital dialogó con una de las integrantes del grupo, Silvia Molina, quien dejó en claro que no es una posición contra la pileta ni contra los juegos, sino una defensa a los árboles como pulmón de toda la sociedad. Y denunció además un crecimiento de la "cementización de la ciudad y el extractivismo urbano, del que en gran parte son responsables las constructoras. Ambas acciones van en contra de las sensaciones térmicas de más de 40 grados de la semana pasada" y "ni el municipio ni la provincia ponen en funcionamiento políticas para contrarrestarlas.".
La activista dijo que el gobernador Omar Perotti prometió en agosto de 2020 plantar un millón de árboles "y nada". Y también apuntó al municipio: "En 2018 se sacaron 66 árboles en la ex Rural y Parques y Paseos aceptó que se saquen 12 árboles centenarios para ampliar el Castagnino: no solo no se hicieron las obras y tampoco se reforestó. Invitamos al gobernador Perotti y al intendente Pablo Javkin a concurrir a la reunión o que manden a algún funcionario y nos den explicaciones de lo que se pretende hacer".
Además, Molina aprovechó la ocasión para invitar a todo vecino o vecina preocupada en los temas ambientales a reunirse cada lunes a las 18 en la plaza San Martín. "Ahí confluimos las personas agrupadas en ´Basta de falsas soluciones´, un grupo de representación nacional, además de los representantes de 'Paren de fumigarnos' y representantes de pueblos originarios, el Colectivo Amaranto y la multisectorial por los humedales".
Este último grupo acampó 33 días frente a la sede local de Gobernación durante el 2020 para debatir acciones contra la quema indiscriminada de las islas, aunque a la luz del presente en ese castigado hábitat, poco se logró.
En estas reuniones entre otras cosas se tiraron ideas alternativas para construir la pileta que seguramente se replicarán en la reunión del jueves próximo. "¿Por qué no se construye donde funciona el Estadio Olímpico de Hockey en Mendoza y el límite de la ciudad? ¿O en el predio donde está el Patio del Mercado en zona sur, un lugar donde los árboles no correrían peligro y hasta se podría realzar la zona? ", fueron algunos de los interrogantes que se expresaron este último lunes.
Más extractivismo urbano
Molina comparte el espacio ambientalista con arquitectos, docentes y vecinos de toda edad que dice "amar la naturaleza" y reaccionó ante el extractivismo de árboles en zona sur cuando se construyó el casino.
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"Éramos pocos cuando empezamos a reunirnos, ahora somos miles, porque cada vez se avanza más sobre la supuesta ciudad verde que vende el municipio como slogan: cada vez hay más cemento, menos árboles en las veredas, cazuelas vacías, no se reforesta. Si hasta se colocan árboles en macetas, cuando sabemos que necesitan espacio y tierra a sus anchas", criticó.
Apuntó otras acciones realizadas en el pasado en perjuicio de la especie en el marco de lo que llamó "la colonización del cemento", como "la extracción de un olmo emblemático en el Parque Urquiza que fue reemplazado por una boletería del Anfiteatro, un árbol añejo en 9 de Julio al 1200 que sacó una constructora o los que sacaron en el ex Batallón 121".
La activista también dijo que le consta a ella y a su grupo que hay pocos inspectores en Parques y Paseos y que "el trabajo de la poda y escamonda es un gran negocio que no se controla".
La vecina aseguró que en muchos casos se poda hasta el 60% del follaje y eso pone en riesgo al ejemplar que puede caer en un año. "Lo realiza personal no capacitado, no entendemos por qué no se convoca a la gente que toma talleres y se capacita en la escuela de Jardinería".