Hoy vence la extensión del plazo para la presentación de interesados en la explotación de un bar en Oroño y el río. Pese a la extensión del plazo, sólo se vendió un pliego que fija las condiciones de inversión. Tiene hasta las 10 de la mañana para ingresar la oferta, de lo contrario la compulsa quedará desierta. De ser así, el actual concesionario seguirá adelante con su negocio con un prórroga.
El director del área de Concesiones municipal, Guillermo Arbio, descartó la posibilidad de una nueva extensión del llamado a licitación, pero dejó abierta la puerta a una nueva convocatoria.
Otras fuentes de la gestión admitieron que se podrían revisar las exigencias, después de reconocer que las concesiones gastronómicas acumulan en los últimos años varios fracasos y numerosas controversias.
El bar y restaurante que se proyecta montar sobre la antigua estructura ferroviaria, donde actualmente funciona bajo el nombre de Patagonia y cuya concesión venció en febrero, se proyectó con un local con una capacidad aproximada de 125 mesas y unos 500 comensales.
Se podrá explotar como bar con amenización musical, pero no se permitirá la figura de confitería bailable. La propuesta puede incluir también el aprovechamiento del área de estacionamiento lindera, que deberá mantenerse de uso público.
Según los cálculos oficiales, los interesados deberán desembolsar unos 38 millones de pesos para realizar las obras obligatorias que prevé el pliego. El valor del canon para la oferta base será de 184.400 pesos mensuales.
Vulnerabilidad
Hasta ayer por la tarde una sola persona había comprado los pliegos, pero no presentó una propuesta. El municipio, a mediados de marzo, decidió extender la licitación hasta hoy porque había recibido varias consultas.
Desde que se conoció el llamado a licitación reapareció la intención de un grupo de empresarios de montar allí una franquicia de la cadena Hard Rock Café.
Fuentes del mercado apuntaron que uno de los interesados en la explotación para la concesión del bar de Oroño y el río sería el empresario Jorge Giannantonio junto con un grupo inversor, quien fue el propietario del ex restaurant Junín, que funcionaba en el Alto Rosario Shopping y donde actualmente funciona el bar Rock & Fellers. Pero hasta ayer no había presentado ninguna oferta, hoy se verá si existe una propuesta o no para ese espacio gastronómico en una zona emblemática de Rosario.