Por Marcelo Carné
Comerciantes esperancinos se congregaron para solicitar a las autoridades municipales.
Los comerciantes de la ciudad de Esperanza decidieron ayer hacer caso omiso a la cuarentena por un par de horas para manifestarse frente al Palacio Municipal con el fin de expresar un contundente y unánime reclamo de apertura de actividades económicas en esa localidad, ubicada a 38 kilómetros al oeste de la capital provincial. Al cierre de esta edición, en tanto, sus pares de Rafaela exigieron lo mismo con un masivo ruidazo.
Conforme las recomendaciones sanitarias, distanciados un par de metros unos de otros y con barbijos colocados, más de 150 pequeños y medianos comerciantes esperancinos se congregaron para solicitar a las autoridades municipales que intercedan ante el gobierno provincial y se les permita trabajar porque se encuentran en una situación límite.
Con aproximadamente 50 mil habitantes, Esperanza, como otras tantas localidades santafesinas que demandan la reanudación de las actividades comerciales para paliar las penurias económicas que ha provocado el aislamiento preventivo social y obligatorio, no se adecúa al requisito de menos de 5 mil habitantes que por ahora autorizó la Casa Gris para la rehabilitación del comercio minorista.
"No tenemos forma de soportar los gastos, como pagos de alquileres de nuestros locales, y afrontar los sueldos este mes de mayo luego de 40 días de parate absoluto", comentó uno de los manifestantes a los movileros radiales que cubrieron la manifestación, la primera de estas características que se registra en territorio santafesino.
"Sabemos que la Intendencia no puede resolver esta cuestión, pero pretendemos que las autoridades locales intercedan ante la provincia porque necesitamos trabajar desde mañana mismo, con los respectivos protocolos y en los horarios y la forma que el Estado disponga", comentaron angustiados.
"Exigimos la apertura de los comercios que hoy están exceptuados a efectuar sus ventas en modo on line y con venta mediante delivery". "Sabemos que la gente no va a salir a comprar como si fuera un shopping, pero necesitamos la apertura inmediata de nuestros negocios para poder sobrevivir", imploraron.
Estefanía Donnet, dirigente de la Unión de Comerciantes de Esperanza consignó además que en esa ciudad hubo solamente un infectado de coronavirus. Se trata de un nene de 3 años que había viajado a Brasil, quien no contagió a ningún poblador. Y hasta ayer tampoco se registraba en la cabecera departamental ningún caso sospechoso en estudio de Covid-19.
Sobrevivir
Mientras el titular de la entidad era recibido por la intendenta local, los manifestantes repudiaron la presencia de varios móviles policiales. Nos están tratando como si fuéramos delincuentes", lamentó Donnet, quien consignó también que "lo único que quiere el comerciante es sobrevivir y tratar de pagar las deudas que cada uno generó en estos 45 días, y para ello contamos además con el apoyo de nuestros conciudadanos".
Según comentó Donnet, entre los rubros más damnificados están "los de servicios personales como peluqueros, masajistas y gimnasios. Además están afectados los rubros de indumentaria o calzados, y los clubes también están apoyando nuestro reclamo como el del resto de la ciudad", aseveró.
La Unión de Comerciantes de Esperanza confeccionó protocolos en cada una de las actividades para los que pide habilitaciones a la provincia y horas después tuvieron respuestas a sus demandas. "Lo único que queremos es sobrevivir. Se trata de una cuestión de supervivencia, de pagar las deudas que nos han generado 45 días de cierre total", habían asegurado.