Tal como se preveía, un alto porcentaje de los efectos de El Niño comenzará a perder fuerza y pasará a la llamada fase de neutralidad, de acuerdo a los modelos dinámicos y estadísticos establecidos por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) para el trimestre abril-mayo-junio. Estas previsiones ubicada en el orden del 83% habían sido anticipadas por distintos meteorólogos consultados en estos últimos meses por La Capital.
¿Qué significa que El Niño ingrese en una fase neutra y cómo impactará en la región? Marzo y abril terminará siendo el bimestre más lluvioso con intensas precipitaciones y acumulados considerables. Pero, a partir de mayo la situación comenzará a estacionarse a un clima un tanto húmedo y con chances bajas de lluvias, con variables térmicas a lo largo del día.
De acuerdo al organismo nacional, el volumen de precipitaciones estará dentro de los valores normales en la región (entre 130 y 240), mientras que las temperaturas variarán entre los 9ºC y los 21ºC e incluso serán inferiores a esos valores habituales.
Qué significa la presencia de un Niño neutro
En declaraciones a La Capital, la meteoróloga Vanessa Balchunas explicó detalles respecto de lo que se avecina en la región: "Cuando hablamos de condiciones neutrales, no quiere decir que algo desaparece, sino que conservamos la variabilidad de región pampeana".
Y abundó: "Esto quiere decir: humedad, temperaturas frías durante las mañanas y noches, y tardes húmedas con ascenso de temperaturas. Todo esto sería hasta la primera parte de mayo, cundo también habrá presencia de neblinas matinales por el enfriamiento nocturno y humedad diurna".
En ese contexto que podría presentarse, explicó: "La neutralidad nos lleva a un ingreso de frío paulatino y persistente, que dista del ingreso estrepitoso de cuando estaba La Niña, y que permitirá que las personas puedan aclimatarse a estas variables térmicas, que llegarían a partir de junio y julio, producto de lo que El Niño habrá dejado".
Balchunas también anticipó que este trimestre contará con la mitad de precipitaciones acumuladas en marzo (400 milínetros). "Existe la probabilidad de que tengamos una Niña, que es lo que suele ocurrir generalmente cuando finaliza el fenómeno de El Niño.
Sin embargo, esa posibilidad podría prolongarse hasta la llegada del verano. Así como El Niño comenzó en julio y los efectos se presentaron en enero, en el caso de La Niña podría confirmarse hacia septiembre y comenzar a impactar ya entrado el verano 2025", profundizó.
De un Niño débil a neutro
Por su parte, el SMN consignó que "las anomalías de temperatura de la superficie del mar en el océano Pacífico ecuatorial son consistentes con una fase de Niño débil. Las TSM (temperatura superficial del mar) mantienen el calentamiento entre 170°E y 100°O, pero de menor magnitud que en los meses previos".
En ese marco, el organismo nacional agregó que "los vientos alisios en el océano Pacífico ecuatorial mostraron mayor variabilidad durante marzo y el Índice de Oscilación del Sur se debilitó, quedando con valores cercanos a condiciones neutrales".
Y concluyó: "De acuerdo a los modelos dinámicos y estadísticos, en promedio, en el trimestre abril-mayo-junio de 2024, hay 83% de probabilidad de que las condiciones sean neutrales, con lo cual se espera que este trimestre sea de transición".
De Niño neutro a una posible Niña
Desde el Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático (CMMC-SAT), Jorge Giometti había anticipado que El Niño comenzaría a perder intensidad en marzo y tornaría a neutro durante el otoño e invierno. Desde ahí en más, había indicado una "probabilidad" de una presencia de Niña para la próxima temporada de primavera - verano.
"Vamos a ingresar a un Niño neutro para mediados del otoño y al promediar el invierno estaremos en un porcentaje de Niña, cuya probabilidad viene in crescendo en nuestra región, por eso habrá que estar atentos a los incendios forestales y rurales a raíz de la cantidad de biomasa que podría generarse en ese lapso tras las fuertes precipitaciones", había apuntado.
Y alertó: "Hay que estar atentos porque ese fenómeno viene avanzando y aumenta de porcentaje de afectación, situación que podría incidir en los cultivos por escasez de humedad".