La Municipalidad ya elevó el protocolo a las autoridades sanitarias de la provincia para que en unos días se pueda retomar la actividad del turf en el hipódromo del parque Independencia de Rosario, que se prevén sin público y con la mitad de los caballos que corren habitualmente. El intendente Pablo Javkin visitó el predio para llevar tranquilidad a los trabajadores.
Sin público, con ocho caballos por carrera y gateras vacías de por medio para mantener el distanciamiento entre los jockeys. Así se estipula la vuelta a las competencias en el hipódromo de Rosario, según el protocolo que la Municipalidad confeccionó y ya elevó para su aprobación al Ministerio de Salud del gobierno de Santa Fe.
Según pudo saber La Capital, habría en principio de una prueba piloto, pero las competencias podrían regresar en poco tiempo en el emblemático predio del parque Independencia, en cuyos boxes se concentran unos 350 caballos que en épocas normales salen a la pista en 24 carreras anuales.
Para dimensionar el movimiento que genera la actividad hípica en Argentina, se estima que por cada animal trabajan siete personas desde su nacimiento hasta que pisan la pista, entre los que se cuentan veterinarios, peones, cuidadores, jockeys, herreros y talabarteros, por citar algunas, más allá de las administrativas y organizativas de cada hipódromo.
En el parque Independencia conviven cuidadores monotributistas cuyo salario corre por cuenta de los dueños de cada caballo, y unos 35 empleados de la Sociedad del Estado Municipal Hipódromo Rosario (Semhr, de las áreas de mantenimiento y administrativa.
Al trote
Lo cierto es que las históricas carreras podrían volver pronto (la ultima reunión fue a principios de marzo), aunque todo depende de la aprobación del protocolo elevado por la Municipalidad a las autoridades sanitarias provinciales.
De ser así, se podrían realizar en las condiciones descriptas, no más de cinco carreras por jornada, entre las 11 y las 14.30, aproximadamente, y sin apuestas presenciales por la obvia falta de público. Santa Fe podría ser una de las primeras provincias en recuperar el turf, antes que los emblemáticos hipódromos de Palermo, San Isidro o La Plata, enclavados en Capital Federal y provincia de Buenos Aires, regiones donde persiste un panorama sanitario más complejo en relación al Covid-19.
El intendente Javkin visitó el Hipódromo el viernes y, en el encuentro con empleados y referentes del sector, quedó claro el trabajo conjunto y la buena predisposición de las partes para atravesar sin sobresaltos el aislamiento que impuso el coronavirus.
En la recorrida también estuvo la diputada del partido Fe, Cesira Arcando, quien señaló que “Javkin dijo que para su gestión es fundamental que el hipódromo cuente con actividad. Los protocolos están elaborados, sólo resta que la provincia los apruebe”.
Además graficó que “un caballo genera siete puestos de trabajo en forma directa, y otros 15 de manera indirecta. Su resurgimiento es fundamental para recomponer el tejido social con posterioridad a la pandemia”.