En el Concejo Municipal impulsan un pedido de informes luego de la aparición del un ciervo en barrio Pichincha, que convulsionó la zona el fin de semana anterior, y que luego fue hallado muerto en Puerto Norte. Frente a las inquietudes que provocó esta irrupción del animal, en plena madrugada de un domingo en un sector urbano consolidado, los ediles Norma López, Marina Magnani y Osvaldo Miatello promovieron esta acción legislativa.
Los requerimientos se elevaron al Ejecutivo Municipal y al Ministerio de Ambiente de la provincia, y plantean una gran cantidad de interrogantes sobre este llamativo caso que dominó la opinión pública rosarina durante varios días.
El escrito se apoya en las noticias que trascendieron sobre este curioso episodio y remarca que "el animal habría escapado de un vehículo, recorrió las calles, entró a un bar (en la esquina de Güemes y bulevar Oroño), donde ocasionó algunos daños, y se lastimó".
Y teniendo en cuenta ese escenario, "el animal huyó del bar y recorrió calles de la ciudad, lo que constituyó un verdadero peligro para el animal, que terminó muerto en la barranca. Y también para la población, pudiendo generar heridos".
El planteo de los concejales recuerda que la ley 14.346 considera un delito penal "el maltrato y la crueldad hacia los animales".
Y además resalta que en la provincia rige la ley 4.830 que regula "toda actividad destinada a la aprehensión, captura, crianza y explotación de animales silvestres con fines comerciales, deportivos o de consumo propio, así como el tránsito, comercio e industrialización de sus piezas y productos, la explotación y crianza".
En el mismo sentido, subraya que esa normativa, en su artículo 3 establece la "prohibición de la caza de animales de la fauna silvestre en todo el territorio de la provincia, así como el tránsito, comercio e industrialización de sus cueros, pieles o productos".
De esa manera, teniendo en cuenta que Rosario es considerada una ciudad pionera en protección de fauna, por haber prohibido todo tipo de espectáculos que utilicen animales, y que los concejales entienden necesario establecer las responsabilidades que caben ante este tipo de hechos, efectuaron el acto formal de un pedido de informes dentro del palacio legislativo local.
En ese escrito solicitaron detalles e información sobre el ciervo que deambuló por las calles de la ciudad en la noche del 4 de noviembre pasado.
Responsabilidades
Preguntaron "si la provincia tomó intervención en este hecho, y qué acciones realizó"; "si se pudo determinar cómo llegó ese ejemplar al centro de la ciudad", "¿quiénes son los responsables?"; "¿qué estrategias tiene la provincia para prevenir este tipo de situaciones?"; y "¿qué destino y cuidados le dan a la fauna encontrada en situaciones similares?".
Apoyándose en esas cuestiones, se encomendó al Ejecutivo para que informe sobre "¿de qué manera y con qué organismos se articula para atender situaciones similares, en las cuales se encuentran animales silvestres en la vía pública?; ¿qué estrategias desarrolló el municipio para evitar la caza, compra, venta y tenencia de fauna silvestre como mascotas?; y si existen videocámaras que hayan podido identificar el supuesto vehículo desde el cual saltó el animal".
El último domingo un ciervo apareció en pleno Pichincha, atravesó el ventanal de un tradicional bar, estuvo unos minutos adentro y salió por la puerta del local ante la atónita mirada del encargado, que no daba crédito de lo que sucedía. La insólita situación también tomó por sorpresa a varios jóvenes que salían de los bares y boliches de la zona, que rápidamente postearon en las redes sociales la extraña situación. Pocas horas después, el animal fue hallado muerto en la zona de Puerto Norte.