Los casos de dengue autóctono siguen trepando en todo el país y ya subieron un 60,5 por ciento entre la primera y segunda semana del año. La situación se replica en toda la provincia de Santa Fe. El Ministerio de Salud provincial informó que en la última semana se confirmaron 124 nuevos casos de dengue en diferentes localidades de centro/norte y sur de la provincia. Desde noviembre a la fecha son 333 los casos diagnosticados (autóctonos e importados).
La enfermedad, transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti, se presenta con fiebre (38º o más), dolor de cabeza, malestar general, cansancio y en ocasiones sarpullido.
Los casos declarados subieron en 7 días de 10.056 a 16.141, según indican los nuevos diagnósticos que informaron las provincias y recolectó la Nación en el Boletín de Vigilancia Epidemiológica. De esta forma, esta enfermedad infecciosa de origen tropical se consolida en la Argentina. El 95% de los casos se notificaron en el noreste argentino, donde ya es considerada enfermedad endémica en las cuatro provincias del NEA, Misiones, Formosa, Chaco y Corrientes. Y durante la temporada veraniega se extiende rápidamente hacia el sur, en especial a las provincias del Litoral.
La circulación viral autóctona en Santa Fe es por los serotipos 1 y 2. Los brotes, según afirmaron desde la cartera sanitaria, "están circunscriptos y controlados por las actividades locales de bloqueo".
Las medidas de prevención habituales siguen siendo descacharrado, colocarse repelente, fumigación. Además, a fines del año pasado se sumó la vacuna (que fue aprobada por Anmat) pero que no forma parte del calendario oficial y por lo tanto hay que pagarla. El precio se incrementó cerca del 70% desde que se lanzó al mercado. Este lunes se conseguía en farmacias y en algunos vacunatorios privados como el de Grupo Oroño, a 61.300 mil pesos cada dosis.
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Pocas consultas
Leonardo Jurado, prosecretario del Colegio de Farmacéuticos de Rosario, confirmó a La Capital que las consultas y las colocaciones disminuyeron. "Al no cubrirla las obras sociales, solamente algunas pocas prepagas nacionales, a la gente se le hace difícil adquirirla. Un relevamiento que hicimos en farmacias del sur provincial mostró que la gente ya casi ni pregunta porque saben del aumento del precio. La mayoría opta por el repelente como medida de prevención".
Para que la vacuna cumpla el objetivo de minimizar las complicaciones por dengue deben colocarse ambas dosis, con tres meses de diferencia una de otra. Además del precio elevado para el bolsillo de los argentinos, nadie sabe cuánto va a salir la próxima dosis.
El aumento en el precio le puso un freno a la demanda en Rosario que venía a buen ritmo. Muchos de los que se colocaron la primera dosis son personas que tuvieron la enfermedad y que temen un nuevo contagio, que puede tener consecuencias más severas.
mosquito dengue aedes aegypti
En tanto, el bloque de diputados del PRO solicitó la semana pasada al Ministerio de Salud de la Nación que contemple la posibilidad de incluir en el calendario la vacuna (Qdenga, de laboratorio Takeda). Hasta el momento el pedido no tuvo respuesta. Si bien desde el lanzamiento de la vacuna la Comisión Nacional de Inmunizaciones viene analizando el tema no se han pronunciado al respecto.
Por ahora, la provincia de Salta hizo una compra de 300 mil dosis para colocar en tres localidades específicas que tienen brotes de dengue de manera constante. Y en los últimos días se sumaron Misiones y Tucumán.
Las provincias pueden decidir la compra por su cuenta.
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La vacuna contra el dengue
La vacuna contra el dengue fue producida por el laboratorio japonés Takeda, luego de 10 años de investigaciones.
Fue aprobada por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), y desde noviembre está disponible en el país. Consta de dos dosis que deben ser aplicadas con un intervalo de tres meses. Está habilitada para ser aplicada desde los 4 años en individuos que pueden o no haber tenido dengue.
Un dato fundamental: al ser una vacuna a virus vivo atenuado no puede ser colocada a toda la población, y por lo tanto es imprescindible contar con indicación y receta médica.
Sí pueden aplicársela quienes tuvieron dengue, independientemente del tiempo que haya pasado desde la confirmación del diagnóstico. Una segunda infección suele ser más riesgosa para la salud.
Argentina es uno de los primeros países que la tiene disponible. Fue aprobada además por la Unión Europea, Reino Unido, Islandia, Brasil (que a su vez está desarrollando su propia vacuna), Indonesia y Tailandia, entre otras naciones.
Tomás Orduna, médico infectólogo tropicalista, ex jefe de Medicina Tropical y Medicina del Viajero del Hospital Muñiz, dijo a La Capital que está "sumamente preocupado" por el panorama de dengue en Latinoamérica y en Argentina. "En nuestro país tuvimos, durante 2023, 18 provincias comprometidas a causa del dengue, con diferentes impactos". Y remarcó: "Por primera vez en 25 años de presencia de dengue en nuestro país no hubo corte de la transmisión durante todo el año en muchas localidades, por eso podemos hablar de que es ya una enfermedad endemo-epidémica que va camino a la endemicidad”.