Con críticas de parte de los gremios docentes y de los estudiantes de escuelas secundarias, se desarrollaron ayer las pruebas nacionales Aprender, donde alumnos de 6º grado de la primaria y 5º del secundario respondieron cuestionarios sobre matemática, lengua y ciencias. Según datos del Ministerio de Educación provincial, el operativo se desarrolló con "normalidad", a excepción de algunas zonas donde el ausentismo fue alto por fuertes lluvias. Entre los secundarios rosarinos la adhesión fue dispar: en algunos casos, no alcanzó ni al diez por ciento de los alumnos. Tampoco los colegios preuniversitarios —el Politécnico, el Superior y la Agrotécnica— participaron del operativo de evaluación (ver aparte). Los resultados de las pruebas se conocerán sobre el inicio del próximo ciclo escolar.
La evaluación alcanzó a los alumnos de escuelas oficiales y privadas. A los chicos de 6º grado del nivel primario se les propuso contestar consignas relacionadas con las áreas de ciencias naturales y sociales. Y los estudiantes de 5º año del secundario tuvieron que mostrar su desempeño en lengua y matemática. Este año se sumó también una muestra de alumnos que cursan 4º grado del primario, a quienes se les tomó una prueba de producción escrita.
En todo el país, la evaluación abarcó a 1.210.620 alumnos de 31.300 escuelas. En la provincia se evaluaron alumnos de 2.563 escuelas (1.690 primarias y 873 secundarias), del ámbito estatal y privado.
En un comunicado de prensa difundido por el Ministerio de Educación de la Nación, se aseguró que de acuerdo a "informaciones preliminares" el operativo se desarrolló "con una participación que supera largamente el 90 por ciento de los estudiantes a ser evaluados".
La subsecretaria de gestión territorial educativa de la provincia, Nora Reina, apuntó que el operativo se desarrolló "con normalidad" y "según lo previsto" en la logística armada para repartir las evaluaciones que llegaron a través de Correo Argentino.
Las cajas con las evaluaciones volvieron ayer a Buenos Aires, donde se corregirán las pruebas cuyos resultados se podrán conocer "a partir de abril", estimó la funcionaria.
Reina advirtió que recién hoy habrá una estimación del porcentaje de alumnos que realizaron la prueba, aunque la funcionaria adelantó que "no se reportaron situaciones de escuelas donde los estudiantes hayan desistido de hacerla, sí de algunos lugares donde se produjeron fuertes lluvias al momento del ingreso escolar y hubo muchos estudiantes ausentes".
Un relevamiento realizado por LaCapital mostró situaciones dispares relacionadas con la evaluación en las escuelas secundarias. Por ejemplo, en el turno tarde del Normal Nº 2, el 40 por ciento de los alumnos se opuso a completar la evaluación y prefirió asistir a clase. En esa escuela la semana anterior hubo varios debates sobre el tema y también se mandó una nota a los padres poniéndolos al tanto del operativo.
En el Normal Nº 1, durante el turno mañana apenas el 10 por ciento de los chicos se sumaron al examen. El resto, participó de una sentada que se realizó en el patio del establecimiento y, después, de la marcha a la plaza San Martin.
De los tres quintos años con los que cuenta la escuela Nigelia Soria también se presentaron a rendir "no más de 6 alumnos por curso", el resto decidió no ingresar al colegio.
Las críticas
Con una marcha y un acto frente a la plaza San Martín, los docentes nucleados en Amsafé Rosario y los centros de estudiantes de algunos de los secundarios más populosos de la ciudad manifestaron su oposición al operativo de evaluación. "No compartimos la direccionalidad y la intencionalidad de esta evaluación, ni la metodología de pruebas estándar", sintetizó el secretario general de Amsafé Rosario, Gustavo Terés.
Para el titular de Sadop Rosario, Martín Lucero, "la principal falla radica en que es una evaluación que está mal diseñada. No se especifica sobre qué estamos evaluando, ni se define cuál es problema que quiere resolverse, ni con qué criterios se evaluará", señaló.
Así planteada, sostuvo el dirigente, "el resultado va a expresar una dificultad a la hora de responder. A través de un dispositivo de evaluación confuso van a decir que los chicos no saben interpretar consignas, pero la realidad es que todas las operaciones cognitivas que en la escuela se tratan de hacer como observación directa de los objetos, registro, experimentación, análisis, no están presentes ni se evalúan".
En la provincia se
evaluaron alumnos de 2.563 escuelas, 1.690
primarias y 873
secundarias