El gobierno nacional reclamó ayer investigar si hubo "mafias" que operaron detrás del choque de trenes en Temperley ocurrido el domingo a la noche y aseguró que el siniestro que causó más de 40 heridos fue un "sabotaje".
El gobierno nacional reclamó ayer investigar si hubo "mafias" que operaron detrás del choque de trenes en Temperley ocurrido el domingo a la noche y aseguró que el siniestro que causó más de 40 heridos fue un "sabotaje".
Mientras tanto, el gremio La Fraternidad deslindó responsabilidades y dijo que los maquinistas "no son kamikazes".
El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, atribuyó el incidente ferroviario en la línea Roca tanto al paro nacional que harán hoy gremios opositores como al cierre en 12 días de las listas para las elecciones presidenciales.
"No creo en las casualidades, creo en las causalidades. Estamos a 24 horas de un paro, un paro que ha sido convocado por los gremios del transporte", sostuvo Randazzo, y reclamó: "Que la justicia determine si hay o no una mafia atrás de todo esto, que se los condene y que terminen presos si es así".
En conferencia de prensa en la Casa Rosada, el precandidato presidencial por el oficialismo aseveró que el siniestro ferroviario del domingo, el tercero durante su gestión y según indicó todos enmarcados en contextos electorales, fue "un sabotaje, sin ninguna duda. Lo tiene que determinar la justicia, pero yo no tengo ninguna duda".
El ministro cargó la responsabilidad en los maquinistas Diego Sánchez y Nicolás Navarro, al asegurar que iniciaron la marcha con "todas las señales rojas" y desoyeron "los pedidos de la torre de control para que detuviera la marcha". Luego mostró el contenido de las grabaciones.
"Parate, parate 2277", repetía la torre de control al motorman de la formación según una grabación que hizo pública el funcionario.
Fuentes judiciales informaron que el fiscal federal de Lomas de Zamora, Sergio Mola, trabajaba sobre la hipótesis de que la formación salió de la estación "con una luz roja, es decir que no tenía luz de salida, e inmediatamente cruza otro semáforo en rojo".
"El tren pasa por un cruce de vías que todavía no estaba preparado en la dirección en la que iba el tren y lo habría roto", agregaron las fuentes, y ratificaron que "en principio" los responsables del choque de trenes pueden ser acusados por el delito de estrago culposo.
Maturano. En tanto, el secretario general del sindicato de maquinistas La Fraternidad, Omar Maturano, rechazó las conjeturas del funcionario en cuanto a que el choque de trenes de ayer haya sido premeditado para perjudicar su precandidatura presidencial.
"Randazzo siempre miente. No es la primera vez, siempre mintió", dijo el gremialista, y advirtió: "Los motorman no son kamikazes ni los conductores de trenes son kamikazes".
El dirigente gremial reconoció que "si es culpable el conductor, primero lo tienen que detener, separarlo del servicio. Lo echarán, harán el juicio y si es culpable, es culpable. No vamos a defender lo que no podemos defender".
Maturano estimó que el siniestro ferroviario "puede ser una falla humana o una falla técnica. Eso lo tiene que decidir la Justicia, no Randazzo".
El delegado de la línea Sarmiento, Rubén "Pollo" Sobrero, coincidió con Maturano en que ningún trabajador "pondría en riesgo su vida" para perjudicar la precandidatura presidencial de Randazzo.
"¿Creés que un trabajador se va a arriesgar a matarse con un choque como el que hubo? Porque el que primero recibe el impacto es el motorman", dijo el delegado gremial.
"¿Alguien cree que un motorman chocaría a propósito, pondría en riesgo su vida, para joderle la candidatura a Randazzo? La verdad, no la veo", sostuvo Sobrero en declaraciones radiales.
La Justicia ya tiene los videos
La Justicia federal ya cuenta con los videos que contienen las imágenes del siniestro ferroviario donde resultaron heridas 41 personas. El titular del juzgado federal de Lomas de Zamora, Alberto Santa Marina, recorrió ayer la estación donde recogió los videos con las imágenes del choque de una formación diesel contra una máquina que operaba en la playa de maniobras, luego de hacer caso omiso a dos señales en rojo y a la voz de alerta de la torre de control.