En un mismo día el gobierno nacional dio marcha atrás y anuló ayer por la tarde una actualización del protocolo de actuación para casos de interrupción legal del embarazo, que había publicado nada menos que en el Boletín Oficial por la mañana.
En un mismo día el gobierno nacional dio marcha atrás y anuló ayer por la tarde una actualización del protocolo de actuación para casos de interrupción legal del embarazo, que había publicado nada menos que en el Boletín Oficial por la mañana.
A días de dejar el poder, el gobierno había sorprendido a la hora más temprana con la publicación de una medida que entre otros ejes autorizaba a las adolescentes menores de 15 años a abortar en hospitales públicos, por considerar que cursar un embarazo a esa edad constituye un riesgo físico y psicológico para su salud.
Llevaba la firma del secretario de Salud, Rodolfo Rubinstein, quien hasta el año pasado fue ministro cuando se reformularon los cargos de gabinete.
Según voceros del gobierno, Rubinstein sacó la resolución sin consultar a la ministra de Salud Desarrollo Social, Carolina Stanley, de quien depende en el nuevo organigrama. Salud pasó a ser Secretaría bajo la órbita de Desarrollo Social.
Precisamente ese fue el argumento que se utilizó para revocar la medida. Fuentes de la Casa Rosada apuntaron que Rubinstein no cumplió con los requisitos mínimos para firmarla y publicarla. Es decir, que no informó ni pidió la opinión de la Secretaría Nacional de la Niñez, del Instituto Nacional de la Mujer y de la Agencia Nacional de Discapacidad.
Rubinstein, que hasta anoche no había renunciado a su cargo pero lo podría hacer hoy, tiene una posición histórica a favor del aborto, en contraposición a Stanley, de cercanía con el Papa y que siempre se mostró en contra de la legalización.
En la cartera que conduce Stanley sostuvieron que los ministros y todo el gobierno se enteraron de la resolución por los diarios y que fue el propio presidente, Mauricio Macri, el que ordenó dar marcha atrás.
"Vamos a revocar la medida de la secretaría de Salud", confirmaron cerca de la ministra ayer a media tarde.
Fuentes oficiales sostuvieron que se analizó despedir a Rubinstein pero hasta anoche nada se supo en ese sentido.
Una de las muestras explícitas de rechazo provino del presidente provisional del Senado, Federico Pinedo. "Me parece lamentable y claramente inconstitucional la resolución del secretario de Salud ampliando de manera irresponsable las causales de aborto no punible y limitando la objeción de conciencia médica", declaró Pinedo apenas despuntabal a tarde.
Y siguió: "El secretario de Salud de la Nación no puede pasar por encima de un debate de seis meses del Congreso Nacional y legislar por sí mismo, contradiciendo normas de rango constitucional".
Lejos estuvo de ser el único caso. Algunos legisladores repitieron en las redes las palabras de Pinedo, como la senadora del radicalismo tucumano Silvia Elías de Pérez, y otros sumaron sus propias voces, como la diputada nacional electa por el macrismo porteño, Dina Rezinovsky, que directamente pidió la renuncia de Rubinstein.
"El secretario de salud Rubinstein resuelve ampliar el protocolo nacional para descartar niños y destruir mujeres. Se olvida que tras meses de debate el Congreso dio un rechazo total a la ley del aborto. Espero su renuncia y que se deje sin efecto esta resolución inconstitucional", escribió la diputada en Twitter.
Radicales con Rubinstein
En apoyo de Rubinstein salió el exsenador radical Ernesto Sanz, uno de los fundadores de Cambiemos. "Mi solidaridad, apoyo y afecto a Rubinstein, un funcionario ejemplar, un lujo de la salud pública. Como tantos radicales a lo largo y ancho del país, nos sentimos orgullosos de su gestión", escribió el mendocino en Twitter.
Lo mismo hizo el exdiputado radical Ricardo Gil Lavedra. "Mi apoyo absoluto y toda mi solidaridad a Rubinstein , un funcionario ejemplar. El protocolo que dictó responde al fallo de la Corte y al código penal vigente, tratando de solucionar un problema grave de salud pública . Resulta inentendible su derogación", destacó.
Además de evitar la obstaculización de un aborto no punible por vía judicial, burocrática o médica, situación que se repite en el país incluso en los casos de abortos no punibles previstos por la ley, el nuevo Protocolo señala que para acceder a la interrupción legal del embarazo se requiere solamente del pedido de la mujer que busca practicarlo, con consentimiento informado y mediante una declaración jurada en la que afirma que su caso se encuentra entre las causales de no punibilidad previstas por la ley, como cuando el embarazo es producto de una violación o representa un peligro para la vida y la salud de la gestante.
Pero el nuevo protocolo también establecía que la intervención debe hacerse en no más de diez días desde el pedido y que no puede ser rechazada por ninguna institución pública o privada, al considerar que la objeción de conciencia es individual y no puede ser institucional.
En la sede ministerial sostuvieron que Rubinstein habría respondido a un pedido del ex ministro Ginés González García, cercano a Alberto Fernández. "En su equipo hay mucha gente de Ginés", dijeron. Rubinstein había ido el martes a la Casa Rosada.
en la cuerda floja. Adolfo Rubinstein cuando expuso en el Congreso a favor de la interrupción del embarazo.
"Me parece lamentable e inconstitucional la resolución del secretario", dijo Federico Pinedo en el Senado