En los últimos años, una bebida a base del "hongo del té" se convirtió en una de las más populares y es tendencia en las redes sociales. Celebridades como Kim Kardashian, Hilary Duff y la Reina Letizia no pueden vivir sin ella y ahora todos quieren probarla. Se trata de la kombucha, una bebida probiótica que supone tener beneficios digestivos y desintoxicantes.
Esta bebida tiene un origen lejano y se ha consumido a lo largo de la historia en todo el mundo, especialmente en Asia y Europa del Este. Hoy se la puede encontrar fácilmente en dietéticas, supermercados e incluso se puede hacer casera.
Lo curioso de esta tendencia es que, para realizarla se necesita un componente clave: el famoso scoby (Symbiotic Culture of Bacteria and Yeast). Este ingrediente es una colonia de bacterias y levaduras que se forma en el mismo té.
¿Qué es la kombucha?
La kombucha es una bebida fermentada cuyo origen proviene de Asia. Se realiza a partir de la fermentación de té, azúcar, agua y scoby.
Su sabor es ácido y ligeramente dulce, con un toque avinagrado. A su vez se puede personalizar, agregando frutas, especias y hierbas de olor a gusto.
¿Cómo hacer kombucha?
Para preparar kombucha se deben seguir los siguientes pasos:
- Hervir agua filtrada y sin cloro. Infusionar el agua con té negro o verde durante 7 o 10 minutos en un recipiente de vidrio esterilizado.
- Agregarle a la preparación azúcar y otra cantidad de agua fría.
- Agregar al recipiente el Scoby. Dejar unos 5 centímetros de aire para permitir el crecimiento del hongo.
- Tapar el recipiente y dejar fermentar a temperatura ambiente durante unos 6 a 9 días.
- Una vez pasado ese tiempo, se filtra la kombucha y se reserva el liquido. En este punto se le pueden agregar frutas, hierbas o aromas a gusto.
- Tapar de nuevo la bebida y dejarla a temperatura ambiente entre 3 a 10 días, hasta conseguir el sabor deseado.
El famoso hongo scoby
El ingrediente esencial para poder hacer kombucha es el “hongo de te”, más conocido como scoby. Se trata de una formación gelatinosa que se forma en el te con azúcar fermentado y esta compuesto por una colonia simbiótica de levaduras y bacterias, como Acetobacter, Glucanobacter, Komagataeibacter, Lactobacillus, Saccharomyces, Zygosaccharomyces, y Komagataeibacter xylinu. Estos microorganismos se alimentan del azúcar añadido al té, descomponiéndolo en ácidos orgánicos y dióxido de carbono.
El scoby se puede conseguir en dietéticas o bien se le puede pedir un scoby a algún amigo o familiar que tenga kombucha, ya que este hongo se suele reproducir.
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@verbena.kombucha Hola, soy Fernanda y hoy te cuento como debe verse un SCOBY SANO Color: Generalmente es de color blanco a crema, aunque puede variar ligeramente dependiendo del té utilizado y del tiempo de fermentación. Textura: Es firme, ligeramente elástica y con una superficie lisa o con pequeñas irregularidades. Espesor: Puede variar dependiendo del uso y la frecuencia de alimentación para el scoby. Brillo: Presenta brillo, como si estuviera húmedo. Consistencia: Es gelatinosa y muy viscosa al tacto. Burbujas: Suele tener pequeñas burbujas en su superficie, lo que indica actividad de las bacterias y levaduras. Hilos o manchas: Es común encontrar pequeños hilos o vellosidades en la superficie, que son parte de la estructura del SCOBY generalmente son LEVADURAS. Olor: No debe tener un olor desagradable, como a podrido, SI debe oler ligeramente ÁCIDO. Cuéntame en los comentarios cómo se ve tu scoby. Nos vemos en clases . . . . #kombucha #scoby #antioxidante #probioticosnaturales #scobyhotel #saludintestinal #saluddigestiva #probioticos sonido original - Verbena Kombucha
Beneficios de la kombucha
Aunque aún no está completamente verificado que la kombucha tenga beneficios para la salud, su popularidad se debe a la creencia de que puede aportar mejoras en varios aspectos. La fama de esta bebida radica en la asociación con los efectos positivos que se han observado en alimentos fermentados como el kimchi o el yogur, que podrían ayudar a reducir la presión arterial y mejorar la salud gastrointestinal
El consumo de kombucha podría aportar una variedad de nutrientes, como vitaminas del complejo B, ácido fólico, y vitaminas C, D, E y K. Además, su proceso de fermentación también puede ofrecer minerales importantes como hierro, zinc, calcio y magnesio, junto con enzimas y levaduras saludables. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos beneficios son aún debatidos y no fueron comprobados definitivamente.
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