Hacer ejercicio se vuelve cada más necesario con el paso de los años. Muchos son quienes no lo disfrutan o no cuentan con tanto tiempo para hacer deporte. En ese sentido, en el último tiempo se hizo conocida una forma de ejercitarse que promete variados beneficios para la salud, en poco tiempo y sin impacto. Se trata de la caminata japonesa.
Caminar siempre ha sido beneficioso para la salud, pero es importante tener presente que no todos los tipos de caminata generan el mismo impacto en el cuerpo. En cuanto a la caminata japonesa, es una técnica de tan solo 30 minutos de duración. Este tipo de entrenamiento consiste en una caminata en intervalos, un método simple pero poderoso.
Entre sus beneficios se encuentran disminuir la presión arterial y el riesgo de infartos, aumentar la masa muscular, y mejorar la eficiencia del sueño cuando se adopta este método de ejercicio de manera constante.
Caminata japonesa: en qué consiste
Lo interesante de la caminata japonesa es que no requiere mucho tiempo para realizarla: son seis ciclos de caminata que suman media hora. Es ideal para quienes no dispongan de mucho tiempo para hacer ejercicio. Además, al ser una práctica de bajo impacto, la pueden practicar personas de cualquier edad, incluyendo los adultos mayores.
Por otro lado, lo distintivo de esta técnica es que no requiere el uso de elementos específicos, tan solo ropa cómoda y calzado acorde. Si se puede, un cronómetro termina de completar la técnica.
El método consiste en caminar un intervalo de 30 minutos y alternar 3 de mayor intensidad con otros 3 de menor. En lugar de caminar a la misma velocidad todo el tiempo, esta técnica propone alternar la velocidad, lo que genera el beneficio en la presión arterial. Por su ritmo variado, puede ser incluso más eficiente que los tradicionales 10.000 pasos diarios.
Uno de los aspectos importante de esta técnica es que requiere constancia. Se señala que la caminata japonesa debe realizarse entre tres o cuatro veces por semana para observar los resultados.