Las chicas se habían enterado de que los hermanos Sardelli iban a visitar Escenario y llegaron a la puerta para recibirlos. "Los fans saben más que nosotros, tienen informantes", bromea Patricio, la voz de Airbag. "Saludamos a todas, siempre tenemos tiempo para ellas", asegura el baterista -y ahora guitarrista- Guido, el más joven de los tres. Ambos fieles a su particular estilo, visten apretados chupines negros, borcegos, pulseras y pelo largo, mientras que Gastón (bajista) desentona con una remera que profesa "Ningún capitalismo es bueno". Hijos de una generación donde prevalece el artista sobre la obra, los Airbag ya son ídolos adolescentes que llegan mañana a las 21.30 al teatro Broadway (San Lorenzo 1223) para presentar su cuarto material discográfico "Vorágine", que muestra una faceta más hard rock. Pero antes -pasada de factura por novias robadas mediante- hablaron de todo con Escenario.
Gastón: nos peleamos con nuestra compañía discográfica, nos agarramos un poco a las piñas y como consecuencia estuvimos sin salir a tocar y preparamos "Vorágine". El tiempo vuela.
Guido: los fans nos escribían en el twitter y facebook que toquemos, y nos preguntábamos: "¿cuándo volvamos, estarán?". Le pusimos Vorágine por esa etapa de cambios que pasamos.
Patricio: al mes que sacamos el disco, estábamos tocando en el Gran Rex a sala llena grabando un DVD en vivo ("Manual de montaña rusa").
—Arrancaron en plena adolescencia, ¿qué balance hacen hasta ahora en su carrera?
Guido: ¡Yo tenía 14 años! Cuando nos empezamos a formar como personas, ya estábamos en esto, así que es parte de mi vida completa.
Gastón: Guido es un "trabajador infantil".
Guido: ¡Explotado por mis hermanos! Esta carrera tiene un montón de caras, pero la cara linda hace que te banques la cara fea.
Patricio: desde que empezamos yo sabía que quería hacer esto para siempre. Fue una cuestión de convicción.
—¿Se esperaban el éxito tan repentino?
Patricio: en aquel momento llenábamos el Gran Rex con el primer disco ("Airbag", 2004), y teníamos un disco de platino pero no teníamos conciencia de eso.
—¿Alguna vez se robaron una novia?
Patricio: sí, pero bueno... (risas) Por suerte tenemos gustos parecidos, digo diferentes... con Gastón.
Guido: a mí me gustan todas.
—El pueblo quiere saber: ¿están solteros?
Patricio: estoy divorciado, estuve casado durante un año. Gastón está casado de verdad (risas, se mandan al frente entre los tres).
Gastón: ¡Soltero!
Guido: yo estoy disfrutando de la vida, la vida empieza recién a los 25, ¿no? bueno, yo tengo 23...
—¿Cómo es la relación con sus fans?
Patricio: súper cercana, nos comunicamos siempre a través de twitter (@AIRBAGoficial) y facebook. Tenemos un diálogo constante y no queremos que se corte porque representa por lo que está pasando la banda en este momento. Eso también es vorágine.
—Fueron especialistas en canciones de amor hasta su segundo álbum "Blanco y negro", después hablaron de "Revolución" o "Mecanismos de control" (track 11 de "Vorágine")...
Patricio: en "Vorágine" hablamos de un camino, dónde querés llegar, dónde querés ir.
Gastón: "Mecanismos de control" hace referencia a las cámaras de seguridad y "Encerrada en el placard" roza el tema de la trata de personas.
Guido: no son las canciones que suenan en la radio, pero como banda tenemos otras facetas para mostrar.
—¿Cómo los encuentra "Vorágine"?
Patricio: nos encuentra en el mejor momento. Desde "Una hora a Tokio" la banda va por otro rumbo, ya que ahí tuvimos dos nominaciones a los Grammy como mejor canción de rock y mejor disco de rock, y eso marca un nuevo panorama que "Vorágine" se encarga de afianzar.
—Cómo fue la experiencia de ser los teloneros de Noel Gallagher en el Orfeo de Córdoba y en Geba de Buenos Aires?
Patricio: fue un premio que nos hayan elegido a nosotros para tocar. Nos pidieron que toquemos más temas de lo que teníamos planeado. Noel nos saludó re-buena onda y además nos sacó el prejuicio que alguna gente tiene que es medio asqueroso.
—¿Hay un estilo más británico en sus videos y canciones?
Patricio: "Una hora a Tokio" es un disco muy británico, y nuestros cambios de look también se dan porque somos impulsivos, el otro día antes del reci me teñí de rojo y quedé así.
—¿Tienen la libertad para hacer lo que sea excusándose en que son estrellas de rock?
Guido: sí... pero yo siempre digo que si me subo al escenario con una guitarra hermosa no lo voy a hacer en bermudas y ojotas, prefiero pecar de ridículo antes que estar insulso.
Patricio: es algo personal, así como me ves vestidito me gusta, pero mis amigos vienen a mi casa y me dicen "¿qué hacés vestido así?" También estamos influenciados por Led Zeppelin, Los Beatles, Oasis.
—La imagen suma y les da identidad, ahora bien, ¿sólo las bandas que cuidan lo estético además de lo musical triunfan?
Todos: ¡En Argentina no!
Activismo sí, militancia no
“Ningún capitalismo es bueno” reza una frase de la remera de Gastón Sardelli. “No tiene nada que ver con nosotros”, aclara Patricio. Pero Gastón explica: “Desde el punto de vista político, la banda es una anarquía ya que piensa que todo Estado es opresor y toda corporación explota a su manera, incluso las discográficas Como banda apostamos al cambio ayudando para que las bandas que recién arrancan tengan un lugar para tocar desde un punto de activismo, no quiero decir la palabra militancia porque está muy ligado a lo político”.