El candidato liberal francés, Emmanuel Macron, cerró ayer su campaña con una tendencia ascendente frente a su rival, la ultraderechista Marine Le Pen, quien no logró capitalizar las debilidades de su contrincante y comenzó a alejarse cada vez más en los sondeos. Pese al crecimiento de Macron en las encuestas, destacados miembros del Partido Socialista y de Los Republicanos hicieron un llamado conjunto en París en contra de la abstención, que podría beneficiar a Le Pen. "Cada voto cuenta y por eso todos tenemos una responsabilidad", aseguró el ex primer ministro socialista, Manuel Valls, quien encabezó un foro "republicano" junto a su homólogo conservador Jean-Pierre Raffarin y el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici.
En el encuentro advirtieron que aunque Macron presenta una clara posibilidad de victoria en los sondeos —con porcentajes del 62 por ciento—, un respaldo del 38 por ciento a Le Pen afecta a la imagen de Francia y a la democracia en el país.
Por su parte, el presidente, François Hollande, llamó a los franceses a "no poner las armas nucleares en las manos equivocadas", durante una visita de Estado a la comuna de Argenton-sur-Creuse. Si bien el temor a la abstención ha dominado la discusión en la previa de la segunda vuelta, los últimos sondeos muestran que Le Pen no salió ilesa del debate del pasado miércoles. La ultraderechista no logró capitalizar las debilidades de Macron ni el ímpetu con el que se lanzó a la campaña un día después de la primera vuelta, cuando se dio un baño de masas en una fábrica en huelga en Amiens, en el norte de Francia, donde Macron era abucheado.
Le Pen recibió críticas de su padre, Jean Marie, quien la acusó en una entrevista de no haber estado a la altura de las circunstancias en uno de los debates, y de su sobrina Marion Marechal Le Pen, quien consideró que después del último duelo televisado, "si obtiene un 40 por ciento de los votos, ya sería una victoria". La aspirante de la ultraderecha, favorita a imponerse en la primera vuelta de abril desde comienzo del año, su intención de voto comenzó a caer en el último tramo de la campaña, hasta ubicarse segunda detrás del candidato liberal. Incluso un responsable de su partido reveló al diario Le Monde que si la campaña hubiera seguido una semana más, habría sido superada por el candidato conservador, François Fillon.
Por la puerta trasera
Ayer, en el último tramo de la campaña, Le Pen fue abucheada por militantes de izquierda en una visita a la catedral de Reims, en el este del país, y debió escapar por un puerta trasera para evitar a la multitud. Le Pen programó a última hora una visita a esa catedral, un lugar simbólico, ya que era allí donde tradicionalmente eran coronados los reyes de Francia, lo que supuso una sorpresa, puesto que su agenda solo incluía para ayer entrevistas con medios de comunicación. "No estás en tu casa", le gritaron los manifestantes en alusión al lema del Frente Nacional "Estamos en nuestra casa".
Los sondeos publicados ayer, último día en que la ley permite hacerlo, revelan que Le Pen no pudo seducir al electorado de sus rivales en la primera vuelta. Todo lo contrario le ocurrió a Macron, quien ayer se dio un baño de masas en Rodez y Toulouse, en el sur de Francia, y que aguarda tranquilo que los augurios de los sondeos cristalicen mañana.
Su victoria parece segura, pese a que el llamado "Frente Republicano", el que apela a votar contra la extrema derecha sea quien sea el rival, no ha gozado del mismo vigor en esta ocasión del que tuvo en 2002, cuando Jean-Marie Le Pen se midió al conservador Jacques Chirac. Los sondeos señalan que Macron, que acabó con 8,5 millones de sufragios en la primera vuelta, tendrá el respaldo del 45 por ciento de los votantes de Fillon, el 54 por ciento de los de Mélenchon y el 72 por ciento de los del socialista Benoit Hamon.
Respaldo europeísta
Macron ha recibido apoyos de todo el arco europeísta y atlantista, desde el ex presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, para quien es un "defensor de los valores franceses y europeos", hasta diversos políticos de la Unión Europea y en especial de Alemania. El socialdemócrata Sigmar Gabriel, ministro de Relaciones Exteriores germano, fue más allá en su respaldo al liberal Macron, y afirmó que en Francia "se decide también el futuro de nuestro proyecto pacífico de Europa". Otro ejemplo del tipo de apoyos que recibió Macron fue la organización Amnistía Internacional (AI), cuya filial francesa, también, alertó que Le Pen defiende "propuestas peligrosas para los derechos humanos", sobre el asilo, las libertades y la igualdad en el acceso a los derechos.
El peso de los europeístas a favor de Macron se explica fácilmente si se tiene en cuenta, además de las propuestas electorales, que bien pueden ser soslayadas una vez en el poder, Le Pen definió claramente su decisión de cumplirlas al anunciar que su futuro primer ministro será Nicolas Dupont-Aignan, un dirigente euroescéptico que en la primera vuelta electoral francesa cosechó apenas 4,7 por ciento de los votos.
Detuvieron a un hombre armado cerca de un cuartel
Fuerzas de seguridad francesas detuvieron en la madrugada del viernes en las proximidades de una base militar en Evreux, oeste de París, a un hombre fichado por haberse radicalizado y al que se le encontraron armas y un video en el que se promete lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI), dijeron ayer fuentes oficiales. El vehículo del sospechoso, que ya había sido clasificado con una "ficha S" (amenaza específica a la seguridad y radicalizados) hizo saltar las alarmas, después de que lo estacionara cerca de la base y lo abandonara con las llaves puestas.
Tras encontrar en su interior un cartucho de fusil y un Corán, se activó un dispositivo para localizar al hombre, que pudo ser detenido de madrugada cuando volvía a su vehículo, indicó L'Express, según el cual el arrestado es un ex militar de 34 años. El semanario añadió que cerca de la zona militar se hallaron, escondidos entre el follaje, un fusil, dos revólveres y municiones. Probablemente el sospechoso preparaba una acción sobre la base militar. La fiscalía antiterrorista de París se hizo cargo de la investigación y pretende determinar los motivos de la presencia del hombre en la zona y si se disponía a cometer una acción violenta. Quedó arrestado bajo acusación de "ingreso fraudulento a una zona militar" y "violación de la legislación sobre armas". En el auto del detenido se halló además un video en el que se promete lealtad al Isis, grabado en una memoria externa USB.
El 18 de abril, cinco días antes de la primera vuelta electoral, fueron detenidos en Marsella dos yihadistas acusados de planear un atentado "inminente". El día 20 un ataque en los Campos Elíseos reivindicado por EI acabó con la vida de un policía e hirió a otros dos agentes, al tiempo que su autor fue abatido. Francia, que se encuentra en estado de emergencia desde los atentados yihadistas del 13 de noviembre de 2015, elevó el dispositivo de seguridad por el ballotage, que movilizará unos 50.000 efectivos a través de la operación antiterrorista Sentinelle.