Grecia y el Eurogrupo se sientan de nuevo a negociar
Los acreedores y socios europeos de Grecia, al igual que el gobierno del primer ministro Alexis Tsipras, llegarán mañana a Bruselas sin haber cambiado un ápice en sus irreductibles posiciones sobre cómo resolver la profunda brecha que los separa para evitar un default de la deuda helena y la salida del país del euro.
10 de mayo 2015 · 01:00hs
Los acreedores y socios europeos de Grecia, al igual que el gobierno del primer ministro Alexis Tsipras, llegarán mañana a Bruselas sin haber cambiado un ápice en sus irreductibles posiciones sobre cómo resolver la profunda brecha que los separa para evitar un default de la deuda helena y la salida del país del euro.
Un día después de la reunión del Eurogrupo, que reúne a los ministros de Finanzas de la Eurozona, en la capital europea, Atenas deberá desembolsar un pago de 750 millones de euros al Fondo Monetario Internacional (FMI), uno de los tres acreedores de Atenas junto con el Banco Central Europeo y la Unión Europea (UE). Entre los tres forman la “troika”, término que se ha archivado a pedido de Tsipras y sustituido por el de “instituciones”.
En vísperas del fin de semana que antecede al encuentro, entre las delegaciones que acompañarán a los ministros a Bruselas se descartaba cualquier posibilidad de que mañana se pueda cerrar un acuerdo y ni siquiera reinaba optimismo sobre la posibilidad de un acercamiento de posiciones. A pesar de este cuadro y de la difícil situación financiera griega, el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, ratificó que “por supuesto que pagaremos al FMI e intentaremos pagar a todos los acreedores”. Aunque nadie duda de que Grecia cumplirá con el Fondo, la mayor preocupación de Estados Unidos, el FMI y la UE, es que mañana cada parte repetirá su parte y no habrá acercamiento real entre las exigencias de los acreedores y los rechazos de Grecia, más allá de las buenas palabras de los últimos días que hablan de una “mejora del marco de la discusión”.
Ayer, el poderoso ministro de Finanzas de Alemania, Wolfang Schauble, declaró que no espera que Atenas y sus acreedores alcancen mañana un acuerdo final a cambio de ayuda financiera, al tiempo que advirtió sobre un posible cese de pagos del endeudado país. “No veo que todo se vaya a resolver para entonces”, dijo Schauble al periódico Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung. Schauble, un aliado muy cercano de la canciller Angela Merkel, dijo que la situación de Atenas no parece buena y que no sabe si el gobierno griego tiene una visión clara de sus finanzas. “Estos procesos también tienen elementos irracionales”, advirtió el ministro germano, agregando que “las experiencias del resto del mundo han mostrado que un país puede repentinamente caer en la insolvencia”.
Pero de momento se han despejado los fantasmas de una brusca interrupción de los pagos por Grecia durante el mes en curso,. Ayer Varoufakis visitó Madrid, donde se reunió con su homólogo español Luis de Guindos, para hablar de las negociaciones entre Grecia y el Eurogrupo. “España y Grecia tienen claramente un interés común, que es el referido a la solución de la actual crisis de liquidez”, dijo el ministro griego en una breve declaración sin preguntas a los medios a la salida del encuentro.
Otro interlocutor de Varoufakis, el comisionado de Asuntos Económicos y Monetarios de la Unión Europea, Pierre Moscovici, reclamó avances en la reunión del Eurogrupo. “Progresos serían que el gobierno de Grecia decida adoptar una serie de reformas que hagan más fuerte a la economía griega”, afirmó Moscovici. “Hasta ahora, las cosas no han ido muy rápido o demasiado lejos. Todos comienzan a entender esto ahora, que no hay alternativa, que tenemos que actuar con rapidez”, agregó.
El 30 de junio finaliza el actual programa de rescate de la “troika”, lo que obliga a las dos partes a prever plazos y condiciones para un nuevo plan para hacer viable el pago de la deuda griega.