El secretario general de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, consideró ayer que la liberación del tipo de cambio efectivizada ayer “tiene aroma a los 90”, y advirtió: “Espero que no le hayan sacado el cepo al dólar y se lo quieran poner a las paritarias”╠
En declaraciones radiales, Moyano dijo que los trabajadores no están dispuestos a perder el poder adquisitivo” y ratificó que pretende que en las próximas paritarias se negocien aumentos salariales de al menos 28%. Pero también pidió que se otorgue por estos días un bono de fin de año y un aumento de emergencia a los jubilados.
Moyano recordó que que “apenas asumió el nuevo gobierno, no tuvo dudas en sacarle los impuestos al trigo, al maíz, a la carne”, pero “sí tuvo dudas en sacarle el impuesto perverso que es el mínimo no imponible de Ganancias al aguinaldo”.
El drástico cambio de política económica instrumentado luego de las elecciones presidenciales tuvo hasta ahora un impacto importante en el poder adquisitivo de los salarios. En noviembre, luego de que el ahora ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, anunciara que en caso de llegar al poder Cambiemos realizaría una devaluación del 40%, una feroz ola de remarcación de precios se activó.
La harina de trigo picó en punta y le siguió la carne vacuna. Luego se anotaron los precios del resto de los alimentos y bebidas y de los productos de consumo masivo.
Por eso, la inflación de noviembre duplicó al promedio mensual que se venía registrando desde el año pasado. Los incrementos continuaron duante diciembre. Para casos como la carne, llegaron al 50%. Según consultoras como el estudio Bein & Asociados, los aumentos del útimo bimestre provocarán que el año la inflación cierre cerca del 29%, siete puntos por encima de lo que se venía proyectando hasta fin de octubre.
El ministro de Hacienda convocó para mediados de enero a un acuerdo económico y social y pidió retrotraer los precios al 30 de noviembre. No incluyó el mes anterior, cuando se desató la ola remarcadora, porque en su relato esos incrementos “son culpa” de la anterior gestión y no de su propio anuncio de devaluación.
Esta semana el gobierno se reunió con empresarios nucleados en la cámara de productores de alimentos, Copal, y del sector supermercadistas. A regañadientes, acordaron seguir hasta enero con Precios Cuidados. Pero el presidente de los industriales alimentarios, Daniel Funes de Rioja, aseguró que no retrotraerían precios porque no eran responsables de la inflación.
En este marco, recrudecen los pedidos de los sindicatos por compensaciones o reapertrua de paritarias. El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), filial l Rosario, Antonio Donello , adelantó que se pedirá un bono de 4 mil pesos a las empresas metalúrgicas de la region. “Es para compensar el aumento s de este último mes”, señaló.
En tanto, el especialista en consumo Guillermo Olivetto, presidente de la consultora W, consideró que tras el levantamiento del cepo “ahora empieza el partido”. El desafío, dijo, es proteger el poder adquisitivo del salario. “El mejor escenario es que el primer semestre sea parecido al 2015”.