Una docena de allanamientos realizados por más de cien policías en tres ciudades del departamento General López, en el sur de la provincia, arrojaron el secuestro de unos 10 kilos de drogas, un auto de alta gama, una importante cantidad de dinero y la detención de 10 personas: 7 hombres y 3 mujeres, entre ellas la esposa de Carlos Andrés Ascaíni, el hombre que está preso y procesado como el narcotraficante que actuaba con la protección del ex jefe de la policía, el comisario Hugo Tognoli.
Denominado "Azúcar blanco", el megoperativo fue ordenado por el juez federal de Rosario Carlos Vera Barros (el mismo que procesó a Ascaíni y a Tognoli el 22 de marzo pasado) a pedido del fiscal Mario Jorge Gambacorta. Entonces, 115 policías de distintas brigadas operativas de la Dirección de Control y Prevención de Adicciones, acompañados por efectivos de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), desembarcaron a partir de las 14.30 de ayer en Villa Cañás, Firmat y Venado Tuerto en forma simultánea y sorprendiendo a propios y extraños con patrullas y camionetas en medio de la siesta.
Según confiaron los voceros, lo que empezaba a concretarse en el terreno era el resultado de cinco meses de investigaciones en las que hubo escuchas telefónicas, seguimientos de vehículos, filmaciones y otros métodos para recabar pruebas tendientes a demostrar el funcionamiento de una "aceitada organización delictiva dedicada a la comercialización de drogas a gran escala", como definió al operativo un pesquisa.
Casa conocida. En la primera de las localidades, en Villa Cañás, el objetivo que llevaban los policías era concreto: una coqueta casa de calle 66 al 300. Allí reside la familia de Carlos Andrés Ascaíni, el empresario anotado en la Afip como transportista pero procesado por comerciar drogas bajo un paraguas policial (ver abajo). Allí la policía apresó a la esposa del hombre, Carina Leguizamón, y le secuestró unos 30 mil pesos en efectivo, dos computadoras y 2,400 kilos de cocaína, parte de la cual estaba fraccionada para la venta.
"Mientras el hombre está detenido su esposa seguía adelante con el negocio de la distribución y venta de estupefacientes", dijo un vocero.
Acerca del allanamiento a la casa de Ascaíni, ayer trascendió extraoficialmente que el supuesto narco supo hace unos 10 días que el mismo se iba a realizar. Fue cuando el juez Vera Barros le amplió la indagatoria en el marco de la causa que lo mantiene procesado y detenido junto al ex jefe Tognoli. Es que a ese expediente se anexaron muchas de las escuchas de esta nueva investigación y entonces el sospechoso pidió que el allanamiento no lo haga la policía provincial, la misma que según él sostiene "lo embagalló el año pasado cuando lo detuvo y le plantó cocaína que después se supo era azúcar blanca", casualmente el nombre que identifica al procedimiento de ayer.
En tanto, en Firmat fueron seis los allanamientos realizados. Cuatro se hicieron en departamentos del barrio Centenario y dos en viviendas del barrio Fredrikson. A quien buscaban allí los pesquisas era a Aldo Totola Orozco, un supuesto narco que ya había caído el año pasado en un oscuro procedimiento luego desestimado por la Justicia por los vicios que entonces cometió la policía (ver abajo). Pero el hombre ya no estaba en su vivienda. Se supone que, a pesar de la estricta reserva en que se manejó todo el procedimiento, alguien pudo avisarle de que estaban tras sus pasos.
Las fuentes oficiales que brindaron información sobre lo ocurrido ayer, confiaron a La Capital que en Firmat se incautaron algunos kilos de cocaína en tubos y pilas, balanzas de precisión, electrodomésticos que serían robados, una importante cantidad de dinero en pesos argentinos y dólares y otros elementos que serían "de importancia para la investigación".
Finalmente, en Venado Tuerto se realizaron 5 allanamientos en distintas propiedades y allí se apresó a Carlos Mele Reynoso, un sindicado narco que fuera denunciado por el diputado provincial de la UCR Maximiliano Pullaro como uno de los proveedores de una importante red de quioscos que sostienen el negocio de la droga en esa importante ciudad del sur santafesino. Junto a Reynoso, dijeron las fuentes, cayeron algunos de sus lugartenientes a los que se les secuestró droga, dinero y otros bienes.
Vínculos. "En la investigación realizada por la policía de la provincia parece quedar acreditado que estos tres hombres (Ascaíni, Orozco y Reynoso) no actuaban en forma independiente. Habría pruebas concretas de que están vinculados entre sí y que conformarían una banda con un fin delictivo concreto", sostuvo anoche la doctora Ana Viglione, titular de la Dirección de Delitos Complejos del Ministerio de Seguridad santafesino. La funcionaria era quien concentraba la llegada desde los distintos domicilios allanados de la información final del operativo.