Los referentes de la Mesa Provincial de Lechería, aunque con algunas reservas,
confían en que el acuerdo sellado la semana pasada con el gobierno nacional y la industria por el
precio de la leche sea el puntapié inicial de un sistema definitivo de distribución de ingresos
dentro de la cadena láctea.
Así quedó de manifiesto en la reunión informativa realizada en la Sociedad Rural
de Rafaela, en la que se desarrollaron los alcances del acuerdo. Entre los presentes estuvieron
Roberto Socín, presidente de la Mesa de Lechería de Santa Fe; Ricardo Garnero, también integrante
de la mesa; y Gustavo Colombero, presidente de la Federación de Centros de Tamberos.
Santa Fe, Córdoba y La Pampa tomaron una posición positiva ante el acuerdo.
Según lo firmado, el nuevo precio mínimo para la materia prima es 0,945 peso por litro pero puede
superar el peso por la compensación del Estado. Esta será de 10 centavos para los que producen
6.000 litros de leche. Los que producen hasta 12.000 litros, cobrarán 5 centavos a partir de los
seis mil. Por encima de ese nivel de producción no habrá compensación.
"Este sistema abarca el 96 por ciento de los tambos de todo el país", sentenció
Garnero. La compensación es por junio, julio y agosto y el precio es por julio y agosto. Las dos
primeras compensaciones y el primer precio sería a partir del 10 de agosto en adelante.
Socín defendió la firma del acuerdo lechero, en medio de la protesta
agropecuaria contra las retenciones móviles. "La complejización del tratamiento de la resolución
125 hizo que se pospusiera también el tratamiento de una salida para el sector lechero", relató.
"Conteníamos a los productores, para evitar males mayores y cuando pasó la discusión al Congreso
tuvimos el espacio y se nos desataron muchos nudos", explicó.
La firma del acuerdo fue criticada hace unas semanas por las entidades gremiales
del sector agropecuario. "Nos duele que algunos dicen que se hizo a espaldas, porque no es así,
nosotros estamos trabajando para la política agropecuaria en su conjunto", dijo Socín.
Por su parte, Ricardo Garnero expresó: "Entendemos que hay mucha desconfianza
entre nuestra relación con el gobierno, pero también creo que hay nuevas oportunidades, aquí hay un
cambio cualitativo, porque llegamos a los niveles más altos del país, que creemos, entendieron en
forma directa la problemática de la lechería".
Sumar consensos. Para Colombero, de Fecet, más allá de que el acuerdo "mejora el
precio de alguna manera", lo que más le preocupa es que "se ha roto algo que era sagrado en esta
protesta, el frente institucional". Señaló que mientras la comisión de enlace de entidades
agropecuarias viene trabajando en forma coordinada con todas las entidades, este acuerdo lo termina
firmando un sector representante de productores. De todos modos, señaló que "lo que sirve hay que
tomarlo".
Ana Rosillo