La reactivación industrial se va afirmando en los territorios a partir de sectores que fueron muy golpeados en los últimos años y que ahora comienzan a mostrar mayor niveles de producción y empleo. Incluso con problemas para cubrir su demanda laboral.
En Santa Fe además del cluster del calzado, el de la maquinaria agrícola está operando en los límites de su capacidad y realizando inversiones en capacidad productiva y capital humano.
La industria de maquinaria agrícola este año se acercará al volumen productivo de 2017, traccionada por una sólida demanda del sector agrícola, que obtuvo una buena cosecha en volúmenes en 2020/21, combinada con altos precios internacionales.
Por lo tanto, la demanda de equipos seguirá sólida en el año en curso, con una actividad sectorial que terminará este año en niveles cercanos a los de 2017 en producción y ventas.
Los últimos datos de la Unión Industrial Argentina (UIA) muestran que en los primeros siete meses del año el sector creció 19,3% interanual y 5,3% sobre 2019.
Por otra parte, en el acumulado anual, 8 de 12 sectores mantuvieron subas respecto de 2019, “principalmente aquellos de bienes durables y algunos de sus encadenamientos (automotores, minerales no metálicos, químicos, tabaco, caucho y plástico y algunos segmentos de alimentos y bebidas, productos textiles y metalmecánica)”.
Allí se observa que la producción de equipos agrícolas tuvo un crecimiento de 74,3% en los primeros siete meses de 2021 según el Indice de Producción Industrial (IPI) que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), tras el robusto incremento de 44,1% en 2020 respecto de 2019.
También los informes privados muestran la buena performance de los sectores industrials, como puntales de la reactivación. El relevamiento que realiza la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (Fiel) mostró que actividad manufacturera registró en agosto una suba del 13% interanual y del 3,1% respecto a julio pasado en la medición con estacionalidad, acumulando así un incremento del 20,1% en los primeros ocho meses del año respecto a igual período de 2020.
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La mejora interanual se sustentó en el buen desempeño de la industria automotriz, la siderurgia, la metalmecánica y la producción de minerales de metálicos para la elaboración de insumos de la construcción.
El impulso de la metalmecánica, donde se destaca la maquinaria agrícola está vinculada a la demanda sostenida por parte del sector agrícola beneficiado por la mejora en las condiciones crediticias para la compra de equipos, así como el alza en los precios internacionales de los commodities que mejoraron la rentabilidad delos productores, según IES Consultores.
Otro factor que impulsa las compras, es que el productor ve a los equipos agrícolas como un resguardo de valor.
La fabricación de equipos agrícolas (considerando las unidades producidas de todos los equipos) habría totalizado un volumen fabricado cercano a 17.400 unidades en el acumulado a julio de 2021. Todos los segmentos exhiben aumentos interanuales.
Al analizar las ventas de los principales equipos en el acumulado a julio de 2021, se verifica una merma de 17,9% en las ventas de cosechadoras (457 unidades), que contrasta con un aumento de 2,9% en tractores (con ventas que totalizaron 3772 unidades). Sin embargo, cabe destacar el fuerte aumento en las ventas de equipos nacionales, tanto de cosechadoras como de tractores (la caída en la venta de equipos importados explica la performance total). Por su parte, entre enero y junio, la venta de sembradoras creció 3,2% y la de implementos de labranza 7,5%.