El cierre de la semana fue positivo para los granos locales. La soja alcanzó los $1.000
generando el ingreso de muchas órdenes de ventas que esperaban este precio. Pero la suba excedió a
la oleaginosa, también el maíz finalizó con mejoras por el alza externa y la preocupación sobre los
cultivos locales donde inicialmente se proyecta una cosecha menor a la actual. El trigo continúa
siendo beneficiado de los rumores de la pronta reapertura de las exportaciones.
En Chicago el saldo fue positivo aunque el cierre no fue a los máximos
operados durante la jornada. Las pasadas caídas de precios y la recuperación de los mercados
financieros en Estados Unidos, ayudaron a los commodities agrícolas.
Los precios futuros también recibieron soporte de la fuerte demanda de
exportaciones.
En la plaza local, los negocios sobre la soja comenzaron a realizarse
antes de la apertura del mercado. Con el cierre positivo de la rueda nocturna de Chicago los
compradores pagaron los $1.000 desde las oficinas, lo que generó un aluvión de negocios antes de la
apertura. Las fábricas de Timbúes, San Lorenzo, Villa G. Gálvez, San Martín, San Jerónimo,
Ricardone y Gral. Lagos pagaron $ 1.000. No se escucharon ofertas por parte de la exportación. Se
estimaron operaciones por 40.000 tn. Mientra stanto, los precios de la soja nueva mostraron mejoras
en sintonía con el resto de la operatoria, pagaron u$s 295. Se relevaron operaciones por 5.000 tn.
Los precios del trigo volvieron a subir. Cada vez se hace más fuerte el
rumor de la pronta reapertura de las exportaciones. Tanto los exportadores como la molinería de
Rosario mejoraron sus ofertas, aunque los vendedores continúan esperando los $ 600. La exportación
en San Martín, Rosario y Gral. Lagos con descarga pagó $ 590. Se relevaron 20.000 toneladas.
La suba del mercado externo y la preocupación sobre los cultivos de la
cosecha local motivaron a los compradores a mejorar las ofertas por el maíz disponible y futuro. La
exportación pagó $ 460 y por entrega en marzo/abril u$s 150.
El girasol disponible, en tanto, mostró mejoras respecto de la jornada
previa. Las fábricas de Deheza, San Martín, Ricardone y Rosario pagaron $ 1.400, subiendo $ 50
respecto de la jornada previa.
La Bolsa porteña despidió la semana con una suba
Sin noticias puntuales más allá de la volatilidad de los mercados extranjeros, los negocios en
la Bolsa porteña despidieron la semana con una mejora del 0,82 por ciento en el lote de las
empresas líderes.
En una jornada que contó con un volumen de 88,98 millones de pesos
(contra los 128,49 millones de la rueda anterior), el índice Merval llegó a acumular una ventaja
del 2,16, pero luego algunos inversores prefirieron cristalizar diferencias.
Entre los bonos también prevalecieron los signos positivos y los mejores
recorridos se anotaron en las emisiones que habían sido más duramente castigadas. El Discount en
pesos avanzó 0,88 por ciento y el Par en la misma moneda recuperó 0,49, mientras que el cupón que
sigue la marcha del PIB quedó 1,62 arriba. Entre todas las emisiones de renta fija se reunió un
volumen por 342,09 millones de pesos.
En cuanto a los papeles privados pareció ser el turno de los menos
líquidos. Las subas fueron lideradas por Polledo Construcciones 7,95%; Comercial del Plata 6,87%;
Paty 6%; Cerámicas San Lorenzo 5,71%; y Grimoldi que avanzó 4,80%.
Ayer el Merval quedó en 1.982,73, pero en la semana el índice tuvo una
baja de 0,98%, una diferencia que demuestra que la confianza no esta restituida aunque los mercados
de todo el mundo se vieron estimulados por un plan para evitar que la economía norteamericana caiga
en recesión.
Los operadores estiman que la semana próxima podría definirse en alguna
medida el futuro de los mercados extranjeros y destacan en este sentido la reunión de la Reserva
Federal norteamericana que deberá propiciar o no, otro ajuste en las tasas de interés. Los mercados
reclaman otro recorte que podría ser de 50 ó 75 puntos básicos, pero lo que quedó claro es que las
Bolsas están muy volátiles y que los vacilantes movimientos pueden generar ganancias o fuertes
pérdidas.
En cuanto a la evolución de la Bolsa porteña, los expertos sostienen que
se mantiene la prudencia de los inversores y que por ahora cualquier reacción se interpreta como un
rebote técnico de duración incierta.
Por otra parte, el precio del oro alcanzó un nuevo récord, impulsado por los precios de los
commodities en alza y un dólar cada vez más débil. Para entrega en febrero llegó a un 924,30
dólares la onza en el mercado de Nueva York.