El Papa Francisco proclamará santo mañana en el Vaticano al beato argentino José Gabriel del Rosario Brochero, más conocido como Cura Brochero, mientras que hoy habrá vigilias de oración en diversos puntos del país para esperar la ceremonia de canonización.
La celebración eucarística de canonización está prevista para las 5 hora de Buenos Aires (a las 10 de Roma) en la plaza San Pedro, y participarán el presidente Mauricio Macri, casi 40 obispos, cerca de 200 sacerdotes y otros 2.000 peregrinos argentinos.
El Cura Brochero, que evangelizó a lomo de mula las sierras de Córdoba e hizo propia las necesidades de los sectores más pobres de esta región, se convertirá de este modo en el primer santo que nació, vivió y murió en la Argentina.
En la ceremonia, que se prevé multitudinaria y durará unas tres horas, el pontífice argentino canonizará a otros seis beatos, entre ellos a José Sánchez Del Río, el adolescente de 16 años condenado a muerte por su fe durante las guerras cristeras en México.
Francisco presidirá la misa que concelebrarán los cardenales argentinos Mario Poli (Buenos Aires), Leonardo Sandri (Congregación para las Iglesias Orientales), Estanislao Karlic (emérito de Paraná) y Héctor Villalba (emérito de Tucumán).
Los casi 40 obispos argentinos presentes en Roma participaron ayer junto a sacerdotes connacionales de una jornada de reflexión sobre la espiritualidad sacerdotal del Cura Brochero en el Pontificio Seminario Mayor, donde el arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos Ñáñez, presidió la misa.
La canonización del Cura Brochero se esperará hoy con vigilias de oración en diversos puntos del país y en el predio de la Providencia, de Villa Cura Brochero.
El Cura Brochero será proclamado santo después de que el Vaticano reconoció lo que la Iglesia considera "milagros" por su intercesión.
El 22 de enero, el Papa autorizó la promulgación del decreto que le atribuye a Brochero la recuperación sin explicación médica, de la niña sanjuanina Camila Brusotti, quien cuando tenía 8 meses sufrió un infarto masivo en el hemisferio cerebral derecho tras ser golpeada por su madre y su padrastro.
El sacerdote fue proclamado beato el 14 de septiembre de 2013 en la localidad cordobesa de Villa Cura Brochero, a cuyo templo el Papa obsequió las campanas con la leyenda "un pastor con olor a oveja".
A esta primera instancia en el proceso canónico llegó después de que el Papa emérito Benedicto XVI firmó el derecho que atribuye al "cura gaucho" la recuperación del niño cordobés Nicolás Flores, a quien los médicos le pronosticaron "vida vegetativa" y problemas neurológicos severos tras sufrir un accidente vial grave.